La cerveza es una de las bebidas alcohólicas más consumidas a nivel mundial, y a la vez es protagonista en reuniones sociales, celebraciones y momentos de relajación. Su presencia en la vida diaria de muchas personas es innegable, y su consumo moderado es comúnmente asociado con momentos de distracción. Sin embargo, aunque muchas personas pueden beberla sin experimentar consecuencias inmediatas, es importante NO ignorar los riesgos que su consumo a corto plazo puede conllevar, especialmente cuando se exceden las recomendaciones de los especialistas.El consumo excesivo de alcohol abarca diversas formas de consumo que pueden representar un problema. Según los expertos, estos comportamientos son:Este término se refiere a la ingesta de cuatro o más bebidas en una sola ocasión para las mujeres y cinco o más para los hombres.Ocurre cuando una mujer consume ocho o más tragos a la semana, o cuando un hombre supera los quince.Aunque estos patrones de consumo pueden ser perjudiciales, la mayoría de las personas que beben en exceso no necesariamente son alcohólicas ni presentan una dependencia crónica del alcohol. Sin embargo, esto no minimiza los riesgos para la salud que pueden derivarse de estos hábitos.El consumo excesivo de alcohol puede desencadenar efectos inmediatos y peligrosos que no siempre son evidentes desde el principio. De acuerdo con el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), estos riesgos incluyen:El alcohol está implicado en accidentes de tránsito, caídas, ahogamientos y quemaduras, lo que aumenta la probabilidad de sufrir heridas graves o mortales.El consumo excesivo puede detonar situaciones de violencia, tales como homicidios, suicidios, agresiones sexuales y violencia doméstica.Consumir grandes cantidades en un corto periodo puede llevar a una intoxicación aguda, una condición médica grave que puede resultar fatal si no se atiende de inmediato.El juicio nublado por el alcohol puede llevar a decisiones imprudentes, como tener relaciones sexuales sin protección, lo que aumenta el riesgo de embarazos no deseados y el contagio de enfermedades de transmisión sexual.El consumo de alcohol durante el embarazo incrementa las probabilidades de aborto espontáneo, muerte fetal y trastornos del espectro alcohólico fetal.El consumo excesivo de alcohol a largo plazo está asociado con el desarrollo de enfermedades crónicas y problemas graves de salud. Entre las condiciones más comunes se encuentran:El alcohol puede contribuir al desarrollo de hipertensión y otros problemas relacionados con el corazón.Un consumo excesivo incrementa el riesgo de varios tipos de cáncer, incluyendo los de mama, hígado, boca y colon.La ingesta prolongada y excesiva de alcohol puede provocar deterioro cognitivo, demencia y problemas de aprendizaje.La depresión, la ansiedad y otros problemas de salud mental están fuertemente vinculados al abuso del alcohol.El consumo excesivo y constante puede llevar a la dependencia, generando trastornos relacionados con el alcohol que son difíciles de superar.*Con información de SUN*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsAppOF