Este miércoles 20 de enero se estrena en Netflix la serie mexicana “Madre solo hay dos”, protagonizada por Ludwika Paleta y Paulina Goto donde también participan Martín Altomaro, Liz Gallardo y Oka Giner, entre otros actores. En esta “dramedia”, “Ana” (Ludwika) y “Mariana” (Paulina), son dos mujeres de distintas edades y formas de pensar que se darán cuenta que no son tan diferentes como ellas creían toda vez que tienen que convivir luego de que en la clínica donde dieron a luz, una enfermera ha intercambiado a sus hijas. Los productores ejecutivos de “Madre solo hay dos” son Carolina Rivera y Fernando Sariñana junto a Alexis Fridman y Juan Uruchurtu que producen a través de su compañía Perro Azul.“Es la primera vez que trabajo con Fernando Sariñana, la verdad es que estoy muy contenta y muy agradecida por la oportunidad y porque este proyecto ha podido llegar a mi vida. Fer es un súper director, igual trabajamos con otros directores en otros capítulos y eso estuvo muy padre también”, expresa Paulina en entrevista. Destaca que en la serie se verá como “Mariana” se irá a vivir a la casa de “Ana” para estar cerca de las dos bebés, pues ambas se han encariñado con las pequeñas.“Es muy loco esto de traer a vivir a un extraño a tu casa y toda esta circunstancia que se da con el intercambio de las bebés, pero todo eso permite que la serie sea muy divertida y finalmente este intercambio de las bebés es lo que acerca a estos dos personajes tan distintos, que creo que lo más me gusta es como el contraste y la diferencia que hay entre las dos mamás en todos los sentidos, en la manera de vivir la maternidad y la experiencia. Para ‘Ana’ sería su tercer hijo, mientras que ‘Mariana’ es su primera vez y fue algo como completamente inesperado y no planeado en su vida. Hay un choque, pero se complementan de manera perfecta y se acompañan en todo este proceso, porque no hay manera perfecta de ser mamá”.Aprender a escucharLudwika comparte que es importante dejar de lado el prejuicio para conocer verdaderamente a las personas. “No puedes juzgar a alguien ni siquiera por las cosas que dice o que piensa. Siento que tenemos que aprender a conocer a la gente un poco más allá antes de emitir cualquier juicio y creo que aplica para todos. Muchas veces ni siquiera queremos acercarnos a la gente porque creemos saber cómo son por una cosa que dijeron, en este caso mi personaje escucha las cosas que dice ‘Mariana’ y emite varios juicios”, los cuales se los comparte a su marido (Altomaro), “y resulta que la vida las junta y aprenden muchísimo una de la otra”.Por un lado, “Ana” es controladora, perfeccionista y una ejecutiva tenaz a la que no se le va nada, por el otro está “Mariana”, una joven más relajada con lo que dice y lo que piensa, pero que tiene problemas internos que resolver con su mamá y su padre ausente. Además, en un inicio se resiste a convivir con el padre de su hija, pues como ella, él también está explorando e iniciándose en el tema de la paternidad.“No voy a ahondar mucho, pero creo que tenemos que aprender y sobre todo en este país a empatar nuestros pensamientos y a no juzgar al otro porque piensa diferente. Creo que esa polarización no nos sirve. Tenemos que aprender a respetar las cosas y las opiniones de alguien que no piensa como nosotros y estos dos personajes resulta que tienen más en común de lo que cualquiera hubiera pensado”, reitera Ludwika.Ambas actrices comparten también que el ritmo de la comedia es muy importante y que las situaciones graciosas no se forzan, sino que deben darse de manera natural y espontánea. “Nos divertimos y la química que se va a percibir en pantalla es algo real que se dio en el set. Ludwika y yo no habíamos trabajado antes y a mí esto en particular luego me pone un poco nerviosa cuando no conozco a los compañeros con los que voy a trabajar. Pero fluyó de una manera natural con ella y con todos mis compañeros, considero que Ludwika es una gran actriz, natural, fresca y honesta”, anota Paulina.Ludwika reitera por su parte que se divirtió con el proyecto, “me siento como pez en el agua, me gusta la comedia bien hecha y que los chistes no sean obvios, me gusta divertirme en escena y eso se encuentra con los compañeros, entre Pau y yo había mucha complicidad y buena onda”.JL