Los canes Coco y Georgie fueron rescatados después de que su dueño, quien vivía en Reino Unido, perdiera la vida por causas que no fueron dadas a conocer. Ambos perros enfermaron gravemente, pero sólo sobrevivió Coco, un cruce de labrador y un perro callejero.Sin embargo, este último perro llamó la atención porque los veterinarios quedaron sorprendidos al descubrir que presentaba síntomas de abstinencia al alcohol.“Después de llegar con su amigo canino tras la muerte de su dueño, él y su compañero se sintieron rápidamente enfermos. Afortunadamente un veterinario estaba en el lugar en ese momento y pudo administrar la atención de emergencia, pero tristemente el amigo de Coco falleció a pesar de nuestros mejores esfuerzos", dijo un médico a principios de este mes de abril.El refugio Woodside Animal Rescue Trust, ubicado en Reino Unido, fue el encargado de rehabilitar a la mascota.Se informó que Coco siguió estando gravemente enfermo y necesitó atención durante todo el día. "Quedó claro que sufría de síntomas que todos apuntaban a la abstinencia de alcohol”, revelaron los encargados del caso.No se sabe con exactitud cómo es que el perro desarrolló un grado de alcoholismo, algunas versiones apuntan que ambos caninos constantemente se quedaban sin agua para beber y recurrían a las botellas de vino que su dueño dejaba por la casa.Mediante una publicación en su cuenta de Facebook, el refugio informó toda la trágica historia de Coco, dejando en claro que actualmente ya se comporta como un perro normal y no necesita medicamentos para sobrevivir.
