La nueva película de Alfonso Cuarón se llama “Roma” y por meses fue un secreto de Estado. Durante un periodo se supo poco de la cinta hasta que hubo una reunión en la Ciudad de México con Netflix, una de las firmas que están detrás de este megaproyecto, con Cuarón y con los productores de la cinta, Gabriela Rodríguez y Nicolás Celis. Dialogaron sobre la creación de este filme que, antes de su estreno al público, participó en el Festival de Venecia donde se alzó con el León de Oro.“Ha sido un proceso bastante discreto el de ‘Roma’, muy poca información se ha dado y creo que eso es muy importante, porque cuando vean la película van a entender por qué es necesario llegar a la cinta con expectativas, esta película sólo se puede juzgar cuando se ve de principio a fin”, comentó Cuarón.Sobre si este proyecto fílmico representa una necesidad de regresar a México, dijo Cuarón que siempre ha estado conectado a su país, pero entiende la noción que se tiene de que esto puede ser así porque también ha hecho cintas fuera de él: “Este proyecto en realidad se empezó a gestar hace 10 años, fue justo después de ‘Niños del hombre’, yo tenía la intención de venir a México, pero en ese momento se complicó por cuestiones personales, pero fue para bien, era la semilla del proyecto, tenía algo más o menos claro, pero se requirieron de estos años para madurarlo. La cuestión de que yo viva fuera del país, siempre ha sido circunstancial en mi vida, al final de cuentas yo sigo pensando en chilango. A mí sí me interesa explorar distintos universos y mundos, no solo de ficción sino de cuestión de personajes, pero tarde o temprano regreso atraído por mi lugar de origen”.Sobre la trama de la cinta, ésta tiene una estructura autobiográfica, desarrollada a partir de la noción que Cuarón tiene de su niñez, allá por los años 70; es una cinta en blanco y negro con una poética narrativa, un sonido envolvente y una estética impresionante.Es un retrato íntimo, conmovedor y optimista de las relaciones familiares en medio de fuertes cambios personales y sociopolíticos. En pocas palabras, “Roma” narra un año turbulento en la vida de una familia de clase media en la Ciudad de México en la década de los setenta. Cuarón, inspirado en las mujeres de su infancia, ofrece un homenaje artístico al matriarcado que moldeó su mundo.La historia se centra en dos jóvenes empleadas domésticas que trabajan para una familia de clase media en la colonia Roma: “Cleo” (Yalitza Aparicio) y “Adela” (Nancy García García), ambas de ascendencia mixteca.“Sofía” (Marina de Tavira), la madre de la familia, convive con las largas ausencias de su esposo para criar a sus cuatro hijos, que “Cleo” trata de cuidar como si fueran propios a pesar de que pasa por un momento muy difícil.Además, “Cleo” y “Sofía”, luchan en silencio contra los cambios que afectan el hogar en un país convulsionado por el choque entre grupos paramilitares y protestas estudiantiles, a la vez que tejen un manto de amor y solidaridad en un contexto donde las clases sociales y distintos orígenes se entrelazan intrincadamente.“Fue una necesidad que desde hace 10 años empezó a palpitar, de hablar acerca de estas mujeres, pero también acerca de mi país. La película es tanto la historia de esta mujer en el contexto de este seno familiar, como la historia de ellas en el contexto del país en el viven y lo que es muy aterrador por una lado, es muy hermoso por otro, muchas de esas cosas no cambian, me refiero a la parte amorosa de los dos lados, de un núcleo familiar y un país, pero por otro, las inmensas llagas que se mantienen palpitando hasta nuestros días”, agrega el director.Al tratarse de una cinta intimista donde Cuarón muestra la visión de su infancia, se pensaría que es un filme de autor que no tiene los alcances de una producción de Hollywood, pero por el contrario, está diseñada con los más grandes estándares de tecnología para cine y el resultado lo podrá ver el público tapatío en pantalla a partir de este 21 de noviembre, cuando la cinta llegue a los circuitos culturales de la ciudad. “La ciudad (de México) ha cambiado tanto y todas las tomas que tiene Alfonso son súper abiertas y se ve todo, creo que no queremos ocultar nada y esto hacía un reto más grande en tomas muy largas con lujo de detalles y tantos elementos que se fueron recreando con el apoyo de todo el equipo que fue parte; por ejemplo, con Eugenio Caballero que hizo todo el diseño de producción, Insurgentes es un set como lo vieron, espectacular, el cruce donde está el Cine Las Américas”, compartió Nicolás.En ese sentido, Gabriela destacó que uno de los retos era que la casa de la infancia del realizador, funcionara con base a la visión que él tenía y que al mismo tiempo sirviera también para poder filmar en ella. Además, Cuarón subraya que el 80% de la cinta nace de eventos de los que él fue testigo: “Parte de la obsesión de esta película era reproducir esos momentos a detalle. Tratar de absorber la esencia de los lugares y eso era rodar los lugares donde esta historia sucedió, en una mayor parte lo logramos, se rodó en la calle donde yo crecí, se rodó en Centro Médico; logramos encontrar el único edificio que quedaba todavía en pie, la única estructura que era una bodega y Eugenio Caballero tomó los materiales de ese lugar para crear un piso perfecto”. En pocas palabras, Eugenio creó el set más grande en la carrera de Cuarón.Además, el sonido es el más complejo que ha hecho el director: “En esta película se mezcló el doble de tiempo que en ‘Gravedad’, es el sonido Atmos más complejo que ha hecho Dolby, porque era parte de recuperar la esencia de ese sonido de esta ciudad”, dice Alfonso, pues quería estar satisfecho incluso hasta de sentir lo olores. La cinta está rodada en 65 milímetros.EstrenoA partir de mañana, 21 de noviembre, “Roma” se exhibirá en Guadalajara en la Sala Guillermo del Toro y en el Cineforo de la Universidad de Guadalajara. Y a Netflix llegará el 14 de diciembre.