Ya está en salas de cine el documental “Al son de Beno” del director y artista visual, Ilán Lieberman, proyecto de largo aliento con el que el cineasta le rinde tributo a su padre Beno Lieberman, destacado folclorista, compositor, arreglista y promotor musical, quien falleciera el 23 de septiembre de 1985. La cinta es distribuida por Artegios, donde además se lanza un LP con 24 tracks.“Ha sido un largo proceso, desde el 2015, que fue cuando tomé la decisión de comenzar este proyecto como proceso de investigación; primero, con la entrega de los archivos sonoros que grabó mi padre durante toda su vida a la Fonoteca Nacional”, expresa Ilán a EL INFORMADOR.Recuerda que en ese año él estaba terminando un proyecto de historia oral en la Sierra Norte de Puebla en una comunidad náhuatl, “donde entrevisté a integrantes de esa localidad para que me contaran su historia personal y me sorprendió mucho la forma tan generosa en la que me contaron su vida, así que estos dos puntos me hicieron imaginar la idea de contar mi historia y a la vez retomar un pendiente que tenía desde la muerte de mi padre, que era entregar estas cintas producto de su trabajo al pueblo de México”.Cuando Ilán buscó a la Fonoteca para hablar del trabajo de su padre y el valioso material que recopiló en colaboración con su aliado Enrique Ramírez de Arellano, la institución valoró mucho recibir esta colección. “Luego fuimos a hablar con Eduardo Llerenas para convencerlo de que hiciera lo mismo, entregar las cintas que él tenía, así conformamos una colección que se presentó como parte del Programa Memoria del Mundo de México para la UNESCO”.En paralelo, el director comenzó a realizar entrevistas a compañeros y amigos de su padre para ir conformando una narrativa para ejecutar un ensayo documental. Para Ilán fue interesante redescubrir a su padre desde lo profesional y también en lo familiar. “Yo estaba descubriendo a mi padre, porque él, al quitarse la vida, se ausentó de nosotros tempranamente, yo estaba por cumplir la edad que él tenía cuando se quitó la vida y eso también me acercaba a la misión de estar haciendo el documental. Entonces, esto es una búsqueda que a la vez es mía, pero a la vez es para el público en general, así que fue cómo buscarlo a él entre los escombros de 1985 e ir pepenando pedacitos de sus filmaciones, fotografías y su colección de audios”. Recuerda que su padre comenzó a hacer estos ejercicios musicales a finales de los años 50, en Israel, donde vivió durante 10 años y donde se hizo músico folclorista. “Después de una década ahí, hizo un viaje que había planeado con varios amigos para navegar por todo el mundo recopilando música y entregar después esos archivos a esa nación de Israel que apenas estaba desarrollándose como país”. Sin embargo, el viaje no resultó como esperaba y viajó solo, pasó por París y al llegar a México se inscribió a la UNAM a la Facultad de Ciencias para estudiar física, luego se salió de la escuela y fundó la Asociación Mexicana de Folklore A.C. donde grababa en una cabina a músicos y cantantes, posteriormente comenzó a realizar viajes al interior de la República para generar este acervo folclórico. Así que los espectadores en este documental conocerán su pasión profesional y también su lado más personal. En esta cinta, el artista visual Ilán Lieberman, lleva a su familia en un viaje musical, que reconstruye la caótica vida y trágica muerte de su padre, Beno Lieberman (26 de diciembre de 1932), pionero de la investigación folclórica en México. Re-visitando poblados montañosos y selváticos remotos, escuchan a los músicos locales -algunos de los cuales Beno grabó en los años 60 y 70, quiénes continúan interpretando la misma música hoy en día. Al confrontar el misterio y dolor provocado por el suicido de su padre, el hijo y dos hijas de Ilán, le hacen preguntas difíciles, al abordar los motivos del silencio, que muchas veces rodean al acto de suicidarse. Y mientras explora la riqueza, intensidad y variedad de la auténtica tradición musical mexicana, Ilán se reconcilia consigo mismo y con su padre, al abrirse a sus hijos y compartir con ellos el perdurable legado musical de Beno. CT