El actor mexicano Pablo Lyle fue declarado ayer culpable de homicidio involuntario por la muerte de Juan Ricardo Hernández, de 63 años y origen cubano, en hechos que se remontan a 2019.Lyle, de 35 años, había comunicado a la jueza Marisa Tinkler Méndez, al frente del caso en la Corte Criminal de Miami-Dade, que por iniciativa propia y bajo el consejo de sus abogados no testificaría en la audiencia.El actor mexicano, conocido por su actuación en telenovelas como “Adorable maldición”, matizó que su decisión no estuvo sometida a presión alguna.El jurado, compuesto por seis personas, dio a conocer su veredicto en su primer día de deliberaciones tras los alegatos finales hechos el lunes pasado, durante los cuales la fiscal Gabriela Alfaro repitió la frase “por favor, no me hagas daño”, supuestamente las últimas palabras de Hernández antes de caer al suelo producto del golpe que le propinó el actor.La declaración de culpabilidad de homicidio involuntario por parte del jurado propició que los familiares del fallecido comenzaran a llorar, en lo que supone el fin -a la espera de la sentencia- de un proceso que llevó a Lyle a situación de arresto domiciliario y al pago de una fianza de 50 mil dólares.El actor mexicano, en el momento de conocerse la declaración de culpabilidad, se mantuvo en calma, sin gesticular y sin perder la compostura. Los abogados de Lyle habían solicitado, sin éxito, la desestimación del caso bajo la ley de defensa propia del estado de Florida. El actor podría pasar hasta 15 años en prisión, con un mínimo de nueve años. Cabe señalar que la fiscalía y la defensa del ciudadano cubano trataron el lunes pasado de influir la decisión del jurado con sus últimos argumentos, apoyados con palabras y gestos de emotividad. Mientras que el abogado Philip Reizenstein, quien defendió a Pablo Lyle, recurrió a una foto que mostraba a los tres hijos y a la esposa de Lyle, Ana Araujo, para subrayar que la conducta del mexicano estuvo basada en un acto de defensa propia.“Este caso es sobre el miedo”, sostuvo de forma categórica el abogado defensor. Por su parte, la fiscal Gabriela Alfaro sostuvo que Lyle golpeó a Hernández de forma innecesaria, en unos hechos que se remontan al 31 de marzo de 2019 en la ciudad de Miami: “Ese golpe que le dio el señor Lyle -al fallecido Hernández- hizo que la víctima cayera hacia atrás para golpearse la cabeza y abrirse el cráneo, heridas que causaron su muerte”, remató la fiscal. En las últimas audiencias de este proceso declararon varios testigos del incidente, pero sin duda el testimonio más importante fue el de Ana Araujo -en la foto-, la esposa de Lyle, quien en la jornada de la tragedia viajaba en el vehículo junto a su cuñado y sus dos hijos. Araujo sostuvo que se asustó muchísimo y que sintió un fuerte golpe en el vehículo durante el incidente. CT