En octubre pasado y cuando aún era considerada prófuga de la justicia, la conductora de televisión Laura Bozzo perdió la demanda que le habían puesto los actores Gabriel Soto e Irina Baeva.Los intérpretes demandaron a Bozzo en octubre de 2020 por los delitos de difamación, acoso y amenazas tras las opiniones públicas que la peruana hizo sobre la pareja.De manera extraoficial, se estima que Bozzo podría pagarles 50 mil dólares tras haber perdido la demanda; sin embargo, en una entrevista publicada por un medio de entretenimiento, la peruana confirmó que su equipo legal interpuso una apelación, ya que no está dispuesta a indemnizar a la pareja."Yo no tengo que pagarle un solo peso al señor (Gabriel Soto), pero igual, si a Irina le molesta mi opinión en el programa de El Gordo y La Flaca sobre lo que yo consideraba que a mí ella no me representaba como mujer, pues lo lamento, lo siento y le pido disculpas", declaró Bozzo.Desde que reapareció públicamente tras conseguir que un juez le otorgara la suspensión definitiva de la orden de encarcelamiento que tenía por un delito fiscal, Laura Bozzo ha reconocido que lamenta la forma en que se expresó de la rusa.Asimismo, la presentadora sostuvo que no quiere pagarles nada y explicó la razón de sus polémicos dichos hacia la controvertida pareja."Soy fanática de Geraldine (Bazán)", admitió, "la cólera que tuve con ella fue por lo que pasó con Geraldine, y debo decirlo, soy fan de Geraldine, y muchas mujeres como yo compartieron ese sentimiento"."Espero que (Gabriel e Irina) sean muy felices, que Dios los bendiga", aseguró, al tiempo que expresó sus deseos de terminar con todos los procesos legales que se mantienen abiertos.JM