Hoy 12 de noviembre llega a Netflix “El comienzo de la vida 2: Naturaleza”, de la directora Renata Terra. Coproducida por diferentes instancias como Fundación Boticário, María Farinha Filme, el Instituto Alana y la Fundación Femsa, además de tener apoyo institucional del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, entre otros. Esta cinta es la continuación del documental lanzado en 2016, la cual propone la relación de los niños con la naturaleza, algo fundamental para el desarrollo de la humanidad.En un encuentro con la prensa, Estela Renner, socia y cofundadora de María Farinha Films, comentó sobre esta nueva entrega: “No cabía hablar de todos los temas de la primera infancia y la naturaleza”, por ello desde el lanzamiento de “El comienzo de la vida” pensaron en tener una o dos secuelas.Uno de los tópicos centrales del documental es nuestro vínculo con la naturaleza, del cual formamos parte: “La gente es parte de la naturaleza, tienen millones de bacterias que son parte de sí”. De allí el propósito del filme de armonizar con la naturaleza: “Somos todos interdependientes”.Laís Fleury, del Instituto Alana, recordó que la producción nació con la misión de honrar a los infantes, por ello también el instituto creó un programa exclusivo sobre este vínculo: “El contacto de la naturaleza es directo con los niños”. En él se estimula en los pequeños el cuidado de la naturaleza:“Es una relación de todos, una responsabilidad compartida”. Además, el contacto con la naturaleza a una edad temprana sirve para un desarrollo integral de las personas: “Muchas investigaciones comprueban que el contacto de la naturaleza y los niños sirve para formar niños integralmente (educativa, social, emocionalmente)”.Laís recordó que desde el instituto y también con la cinta, exhortan a los pediatras sobre la importancia de promover y recomendar desde las clínicas el contacto de los niños con la naturaleza por los múltiples beneficios, que en la salud incluyen la vitamina D y aumento en la inmunidad, “algo importante en esta época de pandemia. Más de 40 años de investigación muestran experiencias positivas, también con el cuidado y la conservación del medio ambiente”.Malu Nunes, directora ejecutiva de la Fundación Grupo Boticario (quienes trabajan por la conservación de la naturaleza desde hace 30 años, en todo Brasil), resaltó que han buscado incidir en el sector de negocios, políticas públicas y el día a día de los ciudadanos. Esto lo hacen mediante la búsqueda de soluciones que interesan a nivel social, ambiental y económicamente, mediante un trabajo fuerte para vincular a la sociedad, para entender la relación de la conservación de la naturaleza con su vida pública y privada, afirmó. Esta vocación coincide con la del filme y su relación con la infancia. Un objetivo a largo plazo es “en 30 o 40 años tener personas encargadas de la toma de decisiones con una consciencia mayor sobre la naturaleza”.Lorena Guillé, directora de la Fundación Femsa, comentó sobre cómo lucen las reacciones de los niños en la cinta, al estar frente a la naturaleza y sus elementos: “Recordarnos cómo los niños se sorprenden con un río, con una lombriz o con una montaña. Esta capacidad de asombro es un gran recordatorio”. Igualmente, Lorena mencionó: “Las conexiones genuinas entre niños y naturaleza pueden revolucionar nuestro futuro”.JL