Una efectiva forma de expresarse es a través de una buena narración que nos haga saltar del susto, llorar conmovidos o atacarnos de risa, por ello, ya solo unos días del Día de las madres, traemos este peculiar listado de películas cuyo eje principal son algunas mamás que te harán agradecer y festejar por la que tienes en casa:Iniciamos con el clásico thriller de dirigido por Alfred Hitchcock en 1960 ¿qué tiene que ver una madre con esta película cuya escena del homicidio en la bañera ya es un clásico del imaginario colectivo? Bueno, recuerda que Hitchcock fue un maestro del giro de tuerca y si bien la película arranca con la historia de Marion Crane, una secretaria, quien tras robar a su empresa huye de la ciudad, el misterio crece donde ella termina su viaje: El Motel Bates.El lugar es atendido por Norman Bates, quien vive en la casa de al lado con su madre, cuya relación entre ambos te pondrá los pelos de punta.Si aún no la has visto, conoce a la señora Bates “a través” de su hijo Norman, descubrirás porque es una de las mamás más recordadas y temidas de la historia del cine. Si ya la viste, sabes de qué hablamos y solo resta volver a verla.Más actual (2019) pero con el mismo mood, tenemos a Greta, interpretada por la magistral Isabelle Huppert, quien hará lo que sea por conseguir y construir su modelo de hija ideal.Si has escuchado la expresión de amor asfixiante, en definitiva este thriller psicológico dirigido por Neil Jordan te hará entender mejor esa expresión.La joven Frances McCullen (Chloë Grace Moretz) padece la muerte reciente de su madre y (de una forma visualmente memorable) conoce a Greta, una viuda con la que entabla una inusual amistad. Las intenciones de Greta son las de una verdadera mamá pero del modo más degradado y por ende peligroso que pueda haber. Así se expresa el terror en este filme.Regla número uno de la paternidad: no vivir a través de los hijos. Si bien es un tropiezo común en algunos padres, en la historia de El Cisne Negro, las consecuencias de este error estalla contra todos: Una bailarina en Nueva York, vive para la danza. Sin embargo, la presión de su controladora madre y la rivalidad entre compañeras termina por mostrarnos una bomba de tiempo en cuenta regresiva.Estrenada en 2011, la película del director Darren Aronofsky consiguió gran aceptación del público, de dónde salieron nutridos comentarios que aseguraban haber vivido algo similar con sus mamás, pero (afortunadamente) en versiones más light.Con Natalie Portman al frente y acompañada de las memorables actuaciones de Vincent Cassel; Mila Kunis; Barbara Hershey; y Winona Ryder, este filme vuelve a recordar la importancia de no extralimitar la influencia que un padre pueda tener con sus hijos.Los latinos sabemos bien el papel de una matriarca, ellas delinean el rumbo y valores de las futuras generaciones como nadie más en la familia y por el bien de la misma.Sin embargo, si algo nos ha sabido enseñar el paso del tiempo, y estas maravillosas entregas de la animación, es que tanto esas figuras matriarcales como sus valores no pueden transcurrir inflexibles todo el tiempo, pues la diversidad natural de una familia terminará por demostrarles su error.Sensibles y oportunas, ambas películas se valen de la relevancia de figuras arquetípicas y hasta literarias (Basta con ver cómo Encanto en su homenaje a la madre posee rasgos tomados de Cien Años de Soledad).Ni hablar de la presión que puede imponer toda una dinastía en el ejercicio de la maternidad. A diferencia de las anteriores, en Turning Red y Valiente podemos ver una confrontación aún más directa entre las hijas, Mei y la princesa Merida contra sus madres, Ming y la reina Elinor, hasta que la relación se revienta, así como las cuatro protagonistas.En estas dos películas tenemos a Disney y Pixar mostrándonos que no es necesario crear un villano para introducir un antagonista en una historia, basta con echarle un vistazo a las relaciones familiares no resueltas para introducir el conflicto.CP