La compañía de streaming Lionsgate+ estrenó recientemente la segunda temporada de su aclamada serie ganadora del British Academy Film Awards (BAFTA), “Gangs of London”, una historia que en su primera entrega presentó a la ciudad de Londres destrozada por las violentas luchas de poder entre las bandas internacionales que la controlan, tras el asesinato del jefe de la familia criminal más poderosa de la ciudad.Una de estas actuaciones —en rol protagónico, lo que le ganó nominaciones al BAFTA y los Critics Choice Awards— es la del actor Sopé Dìrísù (Londres, 1991), quien encarna en la serie a “Elliot Finch”.En entrevista con EL INFORMADOR el histrión señala que en esta temporada su personaje “se ha complejizado, por distintos motivos. Se vincula con personas diferentes y situaciones, debe sobrevivir y comprender quién es en realidad. Para esta temporada, revisará su pasado y enfrenta su encadenamiento a los inversores —bandas internacionales— de los que no puede escapar”.De esta forma, continúa el actor, “parte de su complicada situación es tener que aceptar nuevas alianzas, extrañas”, incluso con el violento líder criminal “Koba” —por un tiempo— y “hacer cosas con el propósito de proteger a su padre; digamos que su panorama ha cambiado y los problemas exteriores son otros”.Es así que para esta segunda entrega, la historia arranca con la presunción de que “Sean Wallace” — hijo del jefe de la familia criminal asesinado en la primera temporada— ha muerto y tras los violentos ajustes de cuentas de la primera entrega, el ex policía encubierto “Elliot Finch” se verá obligado a trabajar para los inversores que, en conjunto con el capo “Asif Afridi” han dado el control al brutal líder “Koba”, quien persigue un monopolio absoluto que, como es obvio, no puede durar siempre.Dìrísù, en estos términos, comparte que enfrentó las nuevas condiciones para su papel “como un desafío, algo que no me había pasado en mi carrera; y había que estar listo para este reto —por fortuna, estoy preparado y listo— sin dejar de disfrutarlo por el tiempo que dure la serie”. En cuanto a la producción, explica el actor que se ha puesto mucho interés en la filmación de secuencias de acción, todo es más intenso y espectacular, “para buscar, como siempre, agradar al público” y superar el éxito de la primera temporada, “hacer esta historia más grande, excitante e interesante, sobre todo en lo referente a secuencias de acción y representación de la violencia”.En cuanto a una diferencia esencial, Dìrísù indicó que uno de los directores, Corin Hardy, en esta nueva temporada ha podido implementar su sello a la serie, de forma contundente; y es ejemplo de continuidad porque trabajó en la primera temporada, fue parte de ese éxito y quién mejor que él para conducir la nueva producción hacia el éxito”.Finalmente, en cuanto a lo que el actor considera que atrae a las audiencias, explica que “la dinámica de la pandilla semeja a la de la familia, es una familia elegida, bajo ciertas circunstancias; en esa dinámica, muchos podemos encontrar puntos de identificación con nuestra propia vida. En esos términos, creo que la serie tiene algo para cada quien”. CT