Hoy llega al Teatro Diana la puesta en escena “La sociedad de los poetas muertos”, la obra tendrá dos funciones, a las 19:00 y 21:30 horas.Dicho proyecto el pasado 9 de noviembre en el Teatro Libanés de la Ciudad de México celebró sus 200 representaciones, acudiendo a la develación de la placa el dramaturgo Tom Schulman, quien también escribió en 1989 la película que fue protagoniza por el actor Robin Williams. En entrevista los actores Alfonso Herrera, Francisco Rueda y Alejandro Puente hablan de la gran familia que se ha formado a raíz de este proyecto que tantas satisfacciones les ha dado.El montaje aborda la historia de vida de un grupo de jóvenes estudiantes, cuyo profesor -encarnado por Herrera-- les enseña a que hay que perseguir los sueños. “Es una obra que se basa en 1959 en Nueva Inglaterra y trata sobre un grupo de estudiantes que están en una academia y llega un nuevo profesor, quien tiene un mensaje tan poderoso que se basa en aprovechar la vida haciendo de ella algo extraordinario y que utiliza como vehículo a la poesía, justo sobre ese detonante se genera todo el conflicto de la historia”, comparte Francisco Rueda, quien para él, el montaje tiene un mensaje poderoso sobre estar vivo y el sentido que tiene tal hazaña.La obra es dirigida por Francisco Franco, quien también es director de cine, y a la pregunta de si no se han planteado hacer la versión mexicana de esta película de finales de los años 80, dice Poncho que no lo cree porque desde su punto de vista la película que ya existe es muy potente, “nosotros lo que estamos haciendo es aventurándonos a hacer esta puesta en escena en el teatro”. Y en ese sentido, remata Alejandro Puente que lo arriesgado es que ellos están decidiendo contar la trama precisamente en el teatro.“Ese es el valor que tiene este proyecto porque ya existe la película. Entonces, nosotros decidimos explorarla desde este otro ángulo y es algo muy bonito porque nos ha traído muchas recompensas en muchos sentidos y que es algo que es una cosa visual impresionante”.A nivel personal esta obra ha sido muy significativa para los tres, a Francisco le pasó en la función número 15 el darse cuenta del poderoso mensaje que guarda la historia, “yo siempre veo una película que se llama ‘Noviembre’ donde hay una frase que dice: ‘quiero cambiar este p… mundo’ y esa yo la hice mi frase de vida y por eso soy actor”.“Entonces, yo estaba en escena viendo a Poncho actuar, y medio estaba jugando con otro compañero, y en eso Poncho dice: ‘Las ideas y las palabras pueden cambiar al mundo’ y para mí fue de decir, ‘¡claro!’, estoy generando ideas, palabras y una obra que puede cambiar al mundo y ese es mi motor, lo que me hace rifarme las funciones, es muy significativo para mí porque me hace despertarme en sábado y decir, ‘hoy me toca función, hoy me toca cambiar al mundo’”.Para Alejandro, cada función le deja un mensaje distinto donde aprende algo todos los días que le toca pararse frente al público, “me llegan mensajes distintos justo cuando los necesito, sin que yo lo sepa y corresponden a que ha habido momentos muy difíciles, pero también muy bonitos en mi vida y yo veo la obra con ojos distintos, no es la misma la que hice hace 200 representaciones ni la que haré hace cinco”.Para Alfonso el montaje es un recordatorio de entender que el tiempo corre y que la vida se va a cavar en algún momento, “tienes que buscar dentro de ti que es lo que realmente te mueve y ponerlo en práctica, uno de los mensajes (de la obra) es que nunca es tarde y al decir esto, quiere decir que este montaje no es solo para los jóvenes, sino que este mensaje le puede llegar muy fuerte al papá o un adulto mayor”.