El clima es imperioso. Este sábado durante el primer día de actividades de la segunda edición de Dreamfields México, la lluvia se apoderó del valle del Estadio Akron poco antes de las 17:00 horas. Si bien el público estaba gozando la tarde y resistiendo al agua, de un momento a otro el aguacero tomó protagonismo y media hora más tarde se detuvo la música.El viento intenso ocasionó algunos incidentes, como el derribo de tarimas de madera y algunos otros contratiempos. La gente se resguardó en las carpas al interior del festival esperando a que continuaran los beats.Antes del diluvio, la constante era ver a los asistentes con looks psicodélicos, coloridos y divertidos, grupos de influencers se hacían sus fotos teniendo de fondo los escenarios principales: Mainstage y Xxlerator, incluso algunos llevaban sus propios fotógrafos. El ánimo y la diversión eran vitales para la tarde. Además del público tapatío, la audiencia venía de otros lugares, por ejemplo de Monterrey y otras ciudades, listos y dispuestos para pasarla bien. Varios asistentes venían coordinados con sus looks inspirados en “La casa de papel” o “Alicia en el país de las maravillas”, chicos musculosos también lucían sus trabajados cuerpos, y supieron aprovechar el momento antes del gélido clima.La música electrónica tienen un público muy fiel y entregado, para muestra, la audiencia vibraba al compás de los sonidos de Trexx y D-Sides, este último prendía a cada asistente con mezclas que incluían a Queen y otras bandas emblemáticas de los años 80 y 90.Aunque la electrónica y sus estilos derivados se apoderaban de la escena del festival, estos se combinaban con el pop, el rock y el reggaetón.En cuanto a la gastronomía, la zona de comida ofreció una amplia gama de opciones para todos los gustos, desde costillas, hasta hot-dogs, pizzas y papas, entre otros antojos ideales para recargar la energía y continuar con la fiesta. Los alimentos eran de fácil acceso a través de los tokens, el sistema de monedas que se implementó para el festival.Este domingo continúan las actividades de Dreamfields en el valle del Estadio Akron.