Gérard Depardieu afrontará el día de mañana un juicio en París por varios delitos de índole sexual contra dos mujeres, un paso más en la caída de un mito que ha partido al cine francés y obligado a hacer un examen de conciencia sobre el silencio en torno a su figura y a la cultura de abusos en el sector.Una veintena de mujeres denunciaron en público o ante la Justicia al actor. Algunas se remontan a varias décadas y varias demandas han sido desestimadas por prescripción de los posibles hechos.Por ejemplo, la Fiscalía de París solicitó en agosto que sea juzgado por cargos de violación contra la actriz Charlotte Arnauld en 2018, aunque el juez de instrucción aún no se ha pronunciado. La Justicia estudia otras seis demandas.La leyenda del actor, de casi 76 años considerado una gloria nacional en Francia, labró su reputación frente a las cámaras y sobre el escenario con 247 títulos de cine y televisión, entre ellos “Cyrano de Bergerac”, “1900”, “Le dernier métro” o “Danton”.En su larga carrera iniciada en 1966 ha trabajado con algunos de los mejores realizadores europeos, como François Truffaut, Jean-Luc Godard, Bernardo Bertolucci, Alain Resnais o Andrzej Wajda, también con incursiones en Hollywood con Ridley Scott o Peter Weir.Ganó dos veces el premio César, el Globo de Oro y la Palma de Cannes, además de galardones por toda su carrera en los festivales de Venecia y el Lumière.En Francia, a Depardieu se le considera un “monstruo sagrado” del cine, pero desde hace un tiempo su lado oscuro degradó su faceta artística. Y no son solo sus conocidas “metidas de pata”, su “exilio fiscal” en Bélgica para pagar menos impuestos, sus elogios al presidente ruso, Vladímir Putin —que le concedió la nacionalidad rusa— o su consumo desaforado de alcohol.En octubre del año pasado, según avanzaban algunos casos legales en su contra, el actor publicó una carta abierta para proclamar su inocencia y lamentar que sus conciertos musicales son abucheados de forma sistemática por grupos de mujeres.A partir de ahí, nuevas denuncias y la difusión de las imágenes no emitidas de un documental, en las que Depardieu lanzaba comentarios extremadamente obscenos sobre una niña de unos diez años, hundieron aún más su imagen.En plena tormenta, en diciembre del año pasado, la actriz Anouk Grinberg, que estuvo en el rodaje de “Les Volets Verts” (donde ocurrieron las presuntas agresiones y abusos que se juzgan mañana), lamentó en entrevistas y artículos el silencio del cine francés.Grinberg aseguró haber visto a Depardieu “tocar a mujeres todo mientras bromeaba”. Y apuntó especialmente de las estrellas más famosas, cuya voz tiene más fuerza: “No puedo entender el silencio, sé que han sido testigos”.Otras actrices añadieron nuevas denuncias y el movimiento ganó impulso con el corto documental de Godréche sobre este tema que se proyectó recién en el Festival de Cannes.EFE Una decoradora lo denunció en febrero de 2024 por agresión, acoso y ultrajes sexistas. Una asistente de realización lo hizo por violencia sexual, ambas en el rodaje de “Les Volets Verts”. CT