El Teatro Nokia de Los Ángeles albergó ayer la Edición 71 de los Premios Emmy. El anunció de Peter Dinklage como ganador en la categoría de mejor actor de reparto por Juego de Tronos hizo pensar que la producción basada en las novelas de George R.R. Martin tendría más éxitos en las grandes categorías, pero perdió varias. Juego de Tronos también se llevó el premio por mejor serie dramática.La mejor dirección fue para Jason Bateman, de la serie Ozark. Por su interpretación en Killing Eve, Jodie Comer se llevó el Emmy a mejor actriz en drama; Billy Porter recibió el premio masculino. El Emmy para mejor guión de drama fue para Jesse Amstrong, por Succession. La categoría femenina para actor de reparto fue para Julia Garner, por Ozark.La ganadora de la noche en las categorías de comedia fue The Marvelous Mrs. Maisel; el actor Tony Shalhoub recibió la estatuilla como mejor actor de reparto en comedia; Alex Borstein se llevó la categoría homóloga, por su papel en la misma serie.Detrás de cámara, los premios en la comedia los acaparó Fleabag, que este año ha tenido su segunda temporada. La producción británica recibió los Emmy por mejor serie cómica, mejor guión (para Phoebe Waller-Bridge) y mejor dirección (Harry Bradbeer). Como mejor actriz principal, la ganadora en comedia fue Phoebe Waller-Bridge, quien repitió Emmy.Una de las producciones favoritas de la temporada fue Chernobyl, que se llevó la mejor dirección (Johan Renck) en la categoría de series limitadas. La serie sobre el desastre nuclear en Europa del Este también recibió el premio por mejor guión, para Craig Mazin, y como mejor producción. Sarah Silverman protagonizó el momento fingiendo estar dormida mientras Saturday Night Live ganaba su Emmy por mejor dirección para programa de variedad. También lamentó en la alfombra roja el formato de entrega de los premios, que ha excluido a los comediantes como presentadores.
