Jorge Bidault sonríe cuando recuerda la manera en que, poco a poco, le dio forma a su “hijo cinematográfico” más reciente: “JericaJazz. Jazz en Tierra Mojada”, documental que estrena en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara y con el que entra profundo en el corazón de uno de los géneros más apasionantes -pero menos explorados-, de la escena local.Sonríe por todo el trabajo que hubo detrás. Agotador y minucioso, reconoce. Pero al mismo tiempo divertido y aleccionador. “‘JericaJazz’ lanza una mirada a las raíces de este género en nuestra ciudad. Es un recorrido por su historia entre los años setenta y noventa, pero al mismo tiempo, busca dar una luz sobre los mitos que hay alrededor incluso hoy”.Sobre lo primero, Bidault explica que eligió esos momentos entre los setenta y los noventa porque “es el instante en que va llegando y se afianza el género en nuestra ciudad. Arribó muy de la mano del rock, pero pronto encontró su propia identidad y sus propios personajes”.Curioso que esos personajes tienen orígenes muy diversos. Unos venían de la música de cámara, otros de la sacra. Al final, encontraron en el jazz una vena creativa común.Entre los personajes retratados por el cineasta están “Felipe de Jesús Espinoza, alias ‘Tanaka’, un músico legendario en la escena local; Beto Rivera, un gran pianista egresado de la Escuela de Música Sacra; Javier Soto egresado de la UdeG; Guillermo Brizio que formaba parte del legendario grupo de rock 39.4; Mario Romero que ha sido maestro de todos los guitarristas del Estado”, entre otros.Además de músicos, “JericaJazz” cuenta con la voz de documentalistas, locutores y periodistas como Alfredo Sánchez y Rogelio Flores en la crónica, así como Nathalie Braux “que es la columna vertebral y colaboró en el guion de este proyecto”.Lejos de otros realizadores y documentalistas que se sientan cómodamente en un trono de sabiduría, Bidault reconoce que abordó el proyecto sin ser un conocedor profundo del movimiento del jazz en Guadalajara. El resultado, anota, lo deja sorprendido.“Cuando empecé a hacer este documental era poco mi conocimiento del género, esa es la verdad, pero estuvo bien que fuera así. Creo que si uno como realizador no se va sorprendiendo con su objeto de estudio, no podrá trasmitir esa emoción al público. Al final ese sentimiento queda plasmado”.Sobre los mitos que rodean al jazz, el documental aborda los más comunes. “Desde que es música para intelectuales o que es anárquico. Todo eso es falso, los exponemos y los vamos derribando de uno en uno”, remata el realizador. “JericaJazz” tendrá el siguiente rol de proyecciones con horario confirmado:Más funciones y sedes a confirmarse en www.ficg.mx
