La franquicia El Conjuro, iniciada en 2013 por James Wan, ha creado un universo de terror en constante crecimiento. Películas como La Monja, Annabelle y La Maldición de La Llorona ofrecen una continuidad llena de villanos ingeniosos y espíritus malignos, cada uno con sus propias historias y modos únicos de interactuar con los protagonistas. La inclusión de múltiples demonios y fantasmas en cada entrega ha sido una táctica esencial para mantener el interés del público, consolidando a muchos de estos seres como íconos del terror moderno. Desde su debut, el universo de El Conjuro ha crecido con secuelas, precuelas y spin-offs que, aunque a menudo tienen historias independientes, comparten elementos cruciales como la repetida aparición de sus monstruos emblemáticos. Estos aspectos aseguran que personajes que podrían haber sido olvidados permanezcan en la memoria colectiva de los espectadores.Los demonios y espíritus recurrentes, como el demonio Valak en La Monja o la muñeca Annabelle, son ejemplos de cómo la serie ha logrado unir sus diferentes entregas. Estos villanos, al reaparecer en distintas películas, actúan como un hilo conductor que unifica la franquicia. Esta estrategia narrativa amplía su impacto al cimentar estas figuras en el imaginario popular. Valak, el antagonista principal de El Conjuro 2, destacó hasta convertirse en el foco de su propia película derivada, La Monja, una entrada aterradora del Universo del Conjuro. El personaje de Valak, inicialmente presentado en El Conjuro 2, se distinguió por su aterradora e intensa presencia, lo que llevó a los productores a desarrollar una película independiente centrada en este demonio. Aunque no tuvo el éxito esperado, ha sido catalogada como una de las producciones más aterradoras de la saga. El impacto inicial de Valak en El Conjuro 2 fue tan significativo que su presencia ha sido considerada uno de los elementos más amedrentadores de la franquicia. La Monja, pese a las críticas mixtas, logró mantener la atmósfera siniestra y misteriosa que caracteriza a esta intensa entidad demoníaca. Annabelle se basa en una muñeca real de los archivos del caso Warren, descrita como poseída por un espíritu demoníaco. Su representación en la película destaca por el uso de efectos prácticos y la limitada utilización de CGI, lo que contribuye a su sensación de realismo y amenaza.Al estar confinada en el sótano de los Warren, se creía que la amenaza de Annabelle estaba contenida. Sin embargo, Annabelle Comes Home mostró que incluso en reclusión, la muñeca puede influir en personas a distancia para intentar obtener su libertad, lo que expande su capacidad de terror dentro de la franquicia y aumenta su atractivo cinematográfico. Bill Watkins: Bill Watkins, el siniestro personaje introducido en El Conjuro 2, dejó una fuerte impresión en los fanáticos del cine de terror. Interpretado como un anciano que persigue a la familia Hodgson después de su muerte, su rol como antagonista secundario brinda escalofríos y numerosos sustos a lo largo del filme. El Conjuro 2, estrenada en 2016, amplió el universo cinematográfico de la franquicia introduciendo a Bill Watkins, quien se diferencia de otros villanos por su apariencia humana. Ese detalle, aunque menos amenazante en comparación con otros demonios, aumenta la sensación de extrañeza y terror en la audiencia.Individualizado como uno de los pocos “fantasmas” genuinos dentro del universo de El Conjuro, Bill Watkins, a pesar de no ser violento por naturaleza, permite ser manipulado por el demonio Valak. Esta dinámica añade una capa adicional de complejidad al personaje y profundiza en la narrativa de la película. La conexión entre un espíritu y una entidad demoníaca fue un recurso argumental que recibió atención y análisis por parte de los críticos de cine tras el estreno de la película. La principal antagonista de la película El Conjuro, sigue siendo una de las villanas más temidas de la serie cinematográfica. La figura de Bathsheba fue presentada por primera vez en El Conjuro original, lanzado en 2013. La aterradora bruja del siglo XIX se ahorcó después de asesinar a su bebé, y dejó una maldición en la residencia que Ed y Lorraine Warren deben investigar.El Conjuro representa a Bathsheba como una entidad con numerosos poderes sobrenaturales, lo que la convierte en una fuerza extremadamente peligrosa para los habitantes de la casa. Esta historia se basa en la investigación de Ed y Lorraine Warren, famosos investigadores de fenómenos paranormales, cuyas aventuras han sido plasmadas en la franquicia de películas.La maldición de Bathsheba se remonta al siglo XIX y ha persistido en la misma casa durante décadas, lo que aumenta la tensión y la atmósfera terrorífica en la película. Annabelle Comes Home presentó a La Novia, un espíritu maligno que poseía un vestido de novia. Ese artefacto fue adquirido por los Warren y colocado en el sótano junto con otros objetos embrujados.La historia relata cómo el espíritu adherido al vestido tomaba control del usuario desprevenido, utilizando el atuendo para asesinar a sus parejas. Aunque en Annabelle Comes Home no se llegó a cometer tales asesinatos, el espíritu fue desatado accidentalmente por los niños cuando Annabelle fue liberada, lo que desencadenó eventos inquietantes dentro de la película.El vestido de novia, cargado con el espíritu malévolo, es uno de los muchos artefactos inquietantes recolectados por los Warren. Su colección busca resguardar objetos peligrosos que podrían causar daño si caen en las manos equivocadas.BB