Uno de los rostros más conocidos en redes sociales es el del conferencista y escritor mexicano, Daniel Habif, quien a través de sus mensajes y reflexiones ha logrado cimbrar las emociones de las miles de personas que lo siguen. Hace unos días visitó Guadalajara para hablar de su reciente libro “Ruge o espera a ser devorado” (Planeta) donde parte de tres conceptos: “Inspirar”, “Inflamar” y “Rugir”, los cuales servirán al lector para comprender sus límites y alcanzar un mayor dominio de sus capacidades.Al respecto, EL INFORMADOR conversó con él sobre este texto que se deriva de su exitosa gira “Ruge”. “Uno puede escribir con todo el entusiasmo del mundo, pero el público al fin y al cabo es quien decide. Uno escribe porque si no se marchita y claramente llegar a un tercer libro se puede escuchar fácil, pero no sólo es escribirlo, es promocionarlo, llevarlo, colocarlo, hablar de él y buscas dignificar este tipo de textos, otorgándole el espacio que uno considera que se merece. Entonces, es mucho el trabajo y el deseo que uno tiene cuando termina una hoja o un capítulo, siempre con las ganas de que cuando alguien te lea, le cimbre, le acompañe y le ayude a sanar en algo”.Las anteriores obras de Daniel son “Inquebrantables” y “Las trampas del miedo”. “Llegar a este tercer libro ha sido importante, porque no soy el mismo de cuando lo empecé a cuando lo terminé, de hecho ya estoy escribiendo el cuarto, pero veamos cómo le va, hasta el momento va caminando muy bien”. Daniel resalta que su evolución desarrollando tres textos durante este tiempo es evidente. “‘Inquebrantables’ son muchos pedazos de mí, como cuando se cae un espejo y ya no se refleja la misma imagen; ‘Ruge’ ese mismo espejo pegado con todo esos pedazos con una imagen llena de quiebres, pero que no me avergüenza. En esencia soy la misma persona, pero mis opiniones creo que se han amplificado, algunas se han hecho más radicales”.En materia de los tres conceptos de los que parte su nuevo libro, destaca Daniel que “Inspirar” consiste en ubicar la batalla que quieres y cuáles son las herramientas con las que cuentas, “no se lidera igual en la guerra que en la paz. Entonces, uno tiene que escoger claramente las armas que necesita para avanzar. No se puede vivir improvisando aunque la incertidumbre y los cómo vayan apareciendo con sus beneficios. ‘Inspirar’ tiene que ver con detenerse, con la misma respiración de darte un espacio de serenidad, de tranquilidad y de decir: ‘a veces voy muy rápido y pierdo el hilo de por qué voy tan rápido’”. Expresa que hay que cuestionarse para qué se va a ese punto, por qué hay un esfuerzo de por medio, cómo se recupera la energía vital y cuáles son los talentos y aptitudes que se tienen.Hablando del concepto “Inflamar”, expresa que esto tiene que ver con poner en orden y jerarquizar las herramientas que se tienen para construir un plan de batalla. “Aquí ya voy a construir las rutas por las que deseo avanzar, sabiendo que tengo que ser flexible, que tengo que tomar decisiones de cómo voy a correr este riesgo y si estoy dispuesto a pagar este u otro precio. Entonces, inflamar tiene que ver con cargar el pecho y decir, ‘estas son las armas, ahora es momento de cargarlas’”.Y finalmente está “Rugir” que para él es avanzar, “‘Rugir’ es decir, ya me preparé, ya sé de qué estoy hecho y este es un punto de no retorno, que a partir de aquí estoy dispuesto a construir una criatura de nuevas dimensiones. Y no es que mi cadena sea más larga sino que ahora estoy dispuesto a romperla porque me contenía con toda esta opresión mental que yo mismo me puse, pero que ahora decido caminar más ligero, soltando lo que no es para llevar y estar dispuesto a avanzar”. Confiesa que rugir tiene que ver con empezar a vivir en el tono en el que se desea.“En el camino probablemente te des cuenta que no hay un plan perfecto, que vas a tener que tener la capacidad de tomar otras ideas, pero rugir es necesitar avanzar”, un momento donde ha terminado la tregua y ahora es momento de alcanzar esas metas que se desean. Confiesa que este grito interno que llevamos todos, no siempre sabemos cómo sacarlo, “me incluyo, porque sanar lleva su tiempo y esto no es cuando tú quieres, sino cuando todo esté en orden, cuanto hayas jerarquizado tus prioridades, uno tiene que arreglarse por dentro y tener pláticas de las cuáles claramente no sales ileso”.Finaliza al decir que “Rugir” no es una postura confrontativa ni violenta, sino que se trata de desatar lo que uno mismo ata. Para él este es un proceso que sigue viviendo todos los días, “porque en mí habitan muchos deseos que no siempre están en armonía, porque muchos de ellos pueden estar repletos de vanidad y otros pueden estar enfocados a otro tipo de plenitud o de paz. Entonces, hacer sinergia con estas cosas y balancearlas, es tejer muy fino y es un constante aprendizaje, por eso se debe de tener la actitud de alumno, porque creer que ya lo sabes es como si estuvieras listo para morir”.Daniel espera regresar a Guadalajara en noviembre a propósito de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL). Mientras continuará promoviendo su libro en Colombia, Argentina, Estados Unidos y España. “Estoy muy enfocado en mi pluma, quiero abrir nuevos senderos, no sólo el de las conferencias, y para eso necesito tener tiempo para prepararme”. El cuarto libro que está en proceso hablará del amor.