Si algo critica Carlos Ballarta de "Chespirito" es que se haya presentado en los años 70 en el Estadio Nacional de Santiago de Chile, lugar en el que la dictadura de Augusto Pinchet torturó estudiantes.Por eso, el standupero no permite que en su casa su hijo vea esos contenidos, bien vistos, afirma, no sólo por la dictadura chilena sino por muchas de las dictaduras a nivel América Latina."Se presentó en dos fechas en el Estadio Nacional, en donde habían torturado estudiantes, por el hecho de que lo recibió Pinochet con honores de jefe de Estado, por el hecho de que fue un éxito durante todas las dictaduras, lo que yo pensaba es: '¿Qué hace una dictadura? Censurar contenido que le puede perjudicar, ¿qué no censuraron?, pues Chespirito'".Ballarta se refiere al año 1977, cuando "El Chavo del 8" y "El Chapulín Colorado" se encontraban en la cresta mediática, y Roberto Gómez Bolaños y su cuadro de actores visitó Chile.De acuerdo con reportes oficiales, casi 20 mil personas asistieron al aeropuerto, haciendo que los comediantes no salieran de las instalaciones por 40 minutos."Es bonito que la gente nos reciba con entusiasmo y sonriendo, eso significa que cuando ven nuestros programas les hacemos olvidar sus penas", dijo Gómez Bolaños en una entrevista posterior.El 12 de octubre Gómez Bolaños, junto con actores que daban vida a "Kiko", "El Señor Barriga", "La Chilindrina", "Don Ramón" y "Doña Florinda" se presentaron en la cancha del Estadio Nacional.En el centro del mismo se desarrolló el espectáculo donde hubo concursos y sketches ante más de 30 mil espectadores de todas las edades.El Estadio Nacional acababa de pasar por un pasaje negro: de septiembre de 1973 a los primeros meses de 1974 fue campo de detención y tortura hacia los opositores del gobierno militar."Chespirito" y su equipo se mantuvo por dos horas en el estadio. El último sketch fue con el personaje de "El Chapulín Colorado", rodeado por niños cuando saltó a la cancha.JM
