El reparto de utilidades es un beneficio que ciertas compañías proporcionan a sus trabajadores como parte de las ganancias obtenidas durante un año fiscal. En México, este reparto está regulado por la Ley Federal del Trabajo y la Ley del Impuesto sobre la Renta (ISR).Según la ley, las empresas deben destinar el 10% de sus utilidades netas para repartir entre los empleados que hayan laborado al menos 60 días en la empresa durante el año fiscal y los directivos, gerentes y socios no participan en este beneficio.Ahora bien, una de las preguntas frecuentes es si se deben pagar impuestos al Servicio de Administración Tributaria (SAT) por recibir este beneficio, la respuesta la compartimos a continuación.De acuerdo con la información de esta institución, las utilidades están exentas del ISR (Impuesto Sobre la Renta) hasta un límite de 90 veces la UMA (Unidad de Medida y Actualización), lo que equivale a aproximadamente nueve mil 700 pesos.Esto implica que si las utilidades obtenidas son inferiores a este monto, no se requiere pagar impuestos sobre ellas.De hecho, es la empresa la responsable de realizar la retención del Impuesto Sobre Renta correspondiente y declararlo ante el Servicio de Administración Tributaria. Esto quiere decir que tú como trabajador no tendrías la necesidad de realizar algún trámite relacionado con los impuestos sobre utilidades.Si la empresa no cumple con el reparto de utilidades, puede enfrentar sanciones económicas. Los trabajadores pueden presentar una denuncia ante la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET). YC