En la actualidad, la tarjeta de crédito se ha convertido en una herramienta financiera indispensable para millones de personas alrededor del mundo, incluido México. Desde su creación, ha transformado la manera en que los consumidores realizan compras, gestionan su dinero y planifican sus gastos.Sin embargo, el uso de las tarjetas de crédito no está exento de riesgos, pues además de que puedes tener un endeudamiento excesivo generando altos intereses, también tener problemas con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), esto si llegas a prestar tu tarjeta a algún familiar o conocido.El SAT tiene un estricto control sobre las transacciones financieras, y compartir tu tarjeta de crédito puede exponerte a auditorías, multas y problemas fiscales serios.La Ley del Impuesto sobre la Renta estipula en su artículo 91 que las personas pueden ser sometidas a un procedimiento de discrepancia fiscal si se verifica que sus gastos superan los ingresos que han declarado anualmente.En caso de que el SAT detecte que tus gastos exceden tus ingresos declarados, primero se te notificará sobre el monto en cuestión.Posteriormente, tendrás un plazo de 20 días desde la fecha de la notificación para informar por escrito a las autoridades fiscales sobre los fondos que utilizaste para pagar la tarjeta de crédito.Además, deberás contar con información adicional, como facturas y tickets, para justificar esos gastos que se realizaron con la tarjeta.En caso de que se confirme la discrepancia, se considerará como ingreso sujeto a impuestos y se aplicará la multa correspondiente.MF
