Tras los meses críticos de marzo, abril, mayo y junio ante el cierre de las actividades no esenciales por la pandemia del nuevo coronavirus, hay buenas noticias en la generación de empleo durante agosto y septiembre. El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) confirma que comenzó a revertirse la crisis desde agosto, con una recuperación de empleo que ya permitió que la recaudación de las cuotas obrero-patronales sea del orden de los 261 mil millones de pesos. Esa cantidad acumulada entre los meses de enero y septiembre pasados representa 2.5% más de lo recaudado con respecto al mismo periodo del año pasado, que fueron 255 mil millones. En el desglose, los meses de enero, febrero, agosto y septiembre han ayudado para tener un superávit en esas cuotas.Norma Gabriela López Castañeda, directora de Incorporación y Recaudación del IMSS, acentuó que “tradicionalmente la relación entre la creación de los empleos formales y el crecimiento económico era de uno a uno, pero esta situación se ha ido modificando, porque el crecimiento del empleo en los últimos años ha sido superior”.Por eso la pérdida de plazas laborales formales como consecuencia de la crisis sanitaria del COVID-19 fue una tercera parte respecto a la disminución de la economía en el país, de 19% del Producto Interno Bruto (PIB). Si se hubiera registrado el mismo ritmo, la cancelación de puestos de trabajo formales habría llegado a los 3.8 millones de empleos perdidos (entre marzo y julio pasados se perdieron un millón 117 mil 584 plazas, como consecuencia de la pandemia y las medidas del confinamiento).En julio pasado, esta casa editorial publicó que la afectación económica detonada por el COVID-19 impactaría en los ingresos del Instituto Mexicano del Seguro Social mediante las cuotas obrero-patronales, las cuales podrían caer hasta ocho mil millones de pesos al cierre de este año, según el Informe ejecutivo de la institución 2019-2020. El impacto negativo de la pandemia sería sobre los 374 mil millones de pesos que se proyectan recaudar por este concepto en la Ley de Ingresos de la Federación 2020, aunque hay buenos noticias al corte de septiembre. Como resultado de la pandemia, se perdieron miles de empleos formales en el país. Lo anterior, pese a que en abril pasado el IMSS anunció el diferimiento de pagos de las cuotas a 48 meses para beneficiar a los patrones. El pasado 15 de julio, el titular del IMSS, Zoé Robledo, destacó que uno de los retos del instituto es incorporar a la seguridad social a 15 millones de trabajadores independientes o sin una relación patronal para ampliar la cobertura actual; sin embargo, la crisis económica complica esa proyección.En el Informe ejecutivo se señala que las finanzas del Seguro Social se han visto presionadas por el aumento de los servicios médicos especializados para atender a los pacientes con el nuevo coronavirus, lo que significa incurrir en erogaciones contingentes que han sido atendidas con el presupuesto actual. Para hacer frente, “al cierre del año se estima necesario hacer uso de nueve mil 897 millones de las Reservas de Operación para Contingencias y Confinamiento”.Al asegurar que su Gobierno tratará de “enderezar entuertos”, el Presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que enviará una iniciativa para reformar el outsourcing. Acusó que esta modalidad de subcontratación es “un fruto podrido del periodo neoliberal”.Señaló que, con esta reforma, se buscará que no se abuse y se protejan los derechos de los trabajadores.“Esa modalidad de contratación también es fruto podrido del periodo neoliberal. Aprovechamos el viaje, la ocasión, para aclarar que eso surgió en el periodo neoliberal, y habrá una iniciativa de ley para hacer una reforma. Vamos a tratar de enderezar entuertos, todo lo que podamos; o sea, hay una propuesta, un poco lo que hicimos con las Afores, sin extremismos, pero protegeremos a los trabajadores para corregir esos vicios de formaciones que se fueron creando durante el periodo neoliberal”.En Palacio Nacional, acentuó que hay casos en los que las oficinas tienen a 10 mil trabajadores y de repente los dan de baja, pero sin ninguna prestación, por lo que se buscará poner orden, pues reconoció que en el Gobierno se contrataba a empleados con ese tipo de contratación.“Hay muchas injusticias que se cometen, entonces, vamos a poner también orden en eso. Claro, no queremos que el empresario esté todo el tiempo ocupado en la administración, pueden tener a alguien que les ayude en la administración, pero que no se abuse de este mecanismo. Tenemos que buscar un justo medio, pero sí vamos a ayudar a los trabajadores en este caso. Es más, hasta el Gobierno contrataba de esa manera, entonces todavía debemos resolver… es como los factureros, todavía no terminamos de limpiar, pero vamos a seguir adelante”.PRONÓSTICO DE LA CEPALSerá hasta 2025 cuando México logre una recuperación económica y regrese a los niveles previos de la pandemia, de acuerdo con las estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).Para 2020, la Cepal estimó una caída de 9% para la economía mexicana, mientras que para el próximo año pronostica un crecimiento de 3.2 por ciento.Durante la presentación del Estudio económico 2020: Políticas macroeconómicas activas para la recuperación y transformación económica y social, la secretaria de la Cepal, Alicia Bárcena, dijo que la recuperación le tomará cinco años a México. Sin embargo, la prospectiva depende de cómo cierre México el último trimestre de este año, ya que en el segundo se ubicó entre los países con mayor impacto negativo en su economía, con una contracción de 19 por ciento.Consideró que “no es momento de austeridad”, pero sí de ajustar las políticas fiscales para aumentar la recaudación, así como evitar la elusión y la evasión para tener más recursos para la reactivación, por lo que consideró como positivas las acciones del Gobierno mexicano para fortalecer los ingresos tributarios.Destacó el anuncio del plan de inversión pública-privada que hizo el pasado lunes el Gobierno junto con el Consejo Coordinador Empresarial porque prevén generar 200 mil empleos y se comprometen recursos equivalentes a 1.2% del Producto Interno Bruto (PIB).Bárcena agregó que México es de los países que emitió bonos para conseguir financiamiento, pero no es deuda. Además, tiene disponible la línea de crédito flexible del Fondo Monetario Internacional por 61 mil 400 millones de dólares.OFICINA DE LA PRESIDENCIAEl jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, pidió a los empresarios ser “el motor” del país, al reconocer la austeridad y el presupuesto limitado del Gobierno por la crisis del COVID-19.“Tenemos un gasto público en el Gobierno restringido por conservar variables económicas sanas. Tenemos una inversión pública muy acotada y orientada a los proyectos estratégicos, así es que ustedes, con este entusiasmo, van a ser los motores de México”, expresó Romo en un evento virtual de la Agenda 2030.Las declaraciones ocurren después de que el Gobierno de México y los empresarios anunciaron un primer paquete de 39 proyectos de infraestructura por 297 mil 344 millones de pesos, en su mayoría con capital privado.El proyecto del presupuesto del Gobierno de México para 2021 es considerado el más austero de las últimas administraciones al representar 25.3% del PIB y pese a un aumento de 5.5% en la inversión, pero enfocado en obras emblemáticas: el Tren Maya, la Refinería Dos Bocas y el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.Por ello, la alianza entre el sector privado y el Gobierno significa un acercamiento después de chocar este año por la gestión de la crisis económica por la pandemia, el cambio en la política energética y el nuevo etiquetado de alimentos. “Cuenten con esta Oficina para todo lo que se propongan y, si se atora algo, pues trataremos de desatorarlo”, prometió Romo.El jefe de la Oficina de la Presidencia participó en el lanzamiento de los grupos de trabajo de los empresarios para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. Hasta ahora se han creado 16 grupos con 70 empresas de todos los tamaños, 23 actores de la sociedad civil, 20 representantes de la academia y tres organizaciones internacionales, detalló Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).La meta es presentar propuestas y resultados específicos al Gobierno dentro de los próximos meses, indicó el líder del CCE, que agrupa a las 12 cúpulas empresariales, con más de dos mil asociaciones y cerca de 80% del PIB. El Gobierno lanzó su estrategia para alcanzar la Agenda 2030 en febrero pasado, cuando la Oficina de la Presidencia reconoció que la falta de crecimiento económico podría impedir los objetivos.Sigue #DebateInformador¿Alguien de su familia perdió el empleo en este año?Participa en Twitter en el debate del día @informador