A finales de 2019 el ciclo natural entre oferta y demanda de agave azul weber, la materia prima del tequila, se acercaba al punto de exceso de oferta y se esperaba un ajuste gradual hacia la baja en el precio. Lo que no se preveía, ni aun en el escenario más conservador, eran los efectos de una pandemia como la actual, donde la industria de bebidas espirituosas es una de las más afectadas. De acuerdo con el Registro Internacional de Vinos y Licores, (IWSR, por sus siglas en inglés), se estima que el sector a nivel mundial tendrá una contracción de al menos dos dígitos durante 2020 y no se espera una recuperación sostenida sino hasta 2024. La afirmación anterior no consideraba que la Organización Mundial de la Salud (OMS) identificó a los bares como uno de los principales lugares de contagio de la enfermedad, lo que ha motivado a varios países a posponer o echar para atrás la apertura de establecimientos de consumo de estas bebidas.En 2019, la industria tequilera tuvo un año récord; se produjeron 351.7 millones de litros, es decir, un crecimiento de 14% con respecto a 2018. También fue un año abundante para los 13 mil 256 productores de agave, pues los precios de la planta pasaron de cinco pesos por kilogramo a más de 30 pesos, un incremento de 500% en tres años. Se registró también un crecimiento en la superficie sembrada y en el número de plantas de manera desproporcionada, por lo que 2019 finalizó con 197 mil hectáreas destinadas a este cultivo, equivalente a 650.1 millones de plantas. El inventario al cierre de ese año era de casi 10 veces lo consumido en el mismo, una señal que auguraba la entrada al ciclo de disminución de precios, sin conocerse los retos de 2020.En vías de una “fuerte sacudida” Ya con la pandemia, hay pocas posibilidades de agotar las existencias de agave. Si se asume una siembra de 100 millones de plantas en este año, dado el ritmo de años anteriores y considerando que, a mayo de 2020, el consumo de la planta aumentó menos de 2% con respecto al mismo periodo de 2019, es a todas luces un ritmo insuficiente y mucho menor que en años anteriores. Se está en la antesala de una fuerte sacudida en la industria del agave azul weber, con sus precios en caída hasta llegar a menos de 10 pesos por kilogramo y productores que abandonarán el sector para mejorar sus rendimientos en otros bienes agrícolas. El sector tequilero debe estabilizarse y adaptarse a la llamada “nueva normalidad”.