Ayer, el valor de mercado de Tesla superó al de Volkswagen por primera vez al alcanzar los 102 mil millones de dólares –el fabricante alemán cerró en 89.6 mil millones de dólares–, un umbral que reportará grandes beneficios a su CEO, Elon Musk, si puede mantener ese logro durante meses. Los títulos del fabricante de autos electrónicos cerraron ayer con un alza de 4 por ciento, al colocarse en 569.56 dólares por acción. Para tomar como punto de comparación, cuando los títulos de Tesla llegaron más temprano a los 572.11 dólares, su valor de mercado era de 103.1 mil millones de dólares, rebasando los 99.8 mil millones de dólares de Volkswagen y quedándose solo por detrás de Toyota. Si bien los escépticos de Musk consideraron ridículo que Tesla valga más que Volkswagen, un fabricante de automóviles que vendió casi 30 veces más vehículos el año pasado, el presidente del consejo de administración de Grupo Volkswagen, Herbert Diess, no es uno de ellos. Diess ha sido el CEO que más ha reconocido que la expansión de Tesla representa una ‘sacudida’ radical para la industria automotriz en más de un siglo. Después de decir hace tres meses que Tesla ya no era un ‘fabricante de nicho’, Diess expresó a ejecutivos principales de Volkswagen, en una reunión interna en Alemania, que los vehículos que estén ‘conectados’ a la red duplicarán el tiempo que las personas pasan en línea, por lo que los autos se convertirán en “el dispositivo móvil más importante”. “Si aceptamos eso, también entendemos el porqué Tesla es tan valioso desde el punto de vista de los analistas”, agregó. El salto por encima de los 100 mil millones de dólares representa para Musk la oportunidad de recibir la primera parte de un premio de pago ‘a todo o nada’ si el valor de mercado de Tesla se mantiene por encima de esa cifra durante un periodo sostenido. En papel, esa parte le daría 346 millones de dólares. Las acciones de Tesla se han más que duplicado desde que reportó una ganancia sorpresiva en el tercer trimestre e informó a los inversores que se adelantó a la fecha prevista para presentar su próximo producto, el Model Y, e inaugurar su fábrica cerca de Shanghai.Tesla puede ser la mayor beneficiaria de una disposición incluida en el acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, según expertos. Como parte del acuerdo firmado ayer, China importará más sistemas de almacenamiento de energía y piezas de Estados Unidos este año y el próximo. La Gigafactory de Tesla en Nevada es, por mucho, la planta de baterías más grande de Estados Unidos, con 42 por ciento de la producción nacional. Ninguna otra fabricante en Estados Unidos se acerca a su capacidad. Si bien la mayoría de las baterías de Tesla van a los autos eléctricos, la compañía ha expandido su negocio de construir paquetes de baterías masivos que pueden almacenar electricidad para redes eléctricas a gran escala. De hecho, la compañía con sede en Palo Alto, California, está negociando un contrato para el suministro de cobalto –un componente clave en las baterías de iones de litio– para su recién inaugurada Shanghai Gigafactory, según personas familiarizadas con el asunto. China es el mayor productor de baterías del mundo, con fábricas capaces de producir 275.560 megavatios-hora en células. Estados Unidos se ubica en un distante segundo lugar, con 33.116 megavatios-hora, según datos de Bloomberg.
