Con la finalidad de cumplir las medidas sanitarias por la contingencia ocasionada por el nuevo coronavirus, y al mismo tiempo ofrecer un mejor servicio a sus clientes, decenas de establecimientos del Centro Histórico de Guadalajara reforzaron sus filtros para poder ingresar a ellos.Un ejemplo es el negocio de ropa alzado en la calle Independencia y Pedro Loza, donde un trabajador esperó afuera con los clientes y los organizó para que respetaran los señalamientos de “sana distancia”.Además de entregarles gel antibacterial y tomarles la temperatura, los empleados, con careta y cubrebocas, pidieron a las personas que se colocaran bien su mascarilla antes de pasar a seleccionar sus prendas.En las dos tiendas departamentales que están sobre el Paseo Alcalde, casi al cruce con avenida Juárez, se colocaron letreros en los que se dejó en claro en dónde se encontraban los ingresos y las salidas, a fin de no bloquear los accesos y evitar aglomeraciones.Los locales pequeños también pusieron de su parte. Sin embargo, a pesar de que no todos tenían tapete sanitizante, en nueve de cada 10 que este medio de comunicación visitó (zapaterías, tiendas de telas y de accesorios) hubo una persona encargada de revisar la temperatura y dar gel antibacterial a cada interesado en entrar. En la mayoría de los casos se establecieron aforos reducidos. Así, para permitir la entrada de más personas, antes debían salir ciertos compradores.“Esta forma de abrir en el Buen Fin me gustó, porque en el interior de la tienda hay menos personas y no se hace el ‘amontonadero’ como en otros años. Así se puede ver más a gusto”, dijo Patricia, una tapatía que buscaba ropa en el primer cuadro tapatío.
