Hace 15 años Marisol Silva vivió la pérdida de un querido amigo. Estando en su velorio, su hermana se le acercó y le hizo una pregunta que desencadenó en toda la idea de lo que hoy es Piel Chinita. “Me dijo ‘Marisol, ¿cómo le voy a hacer para soportar lo que me reste por vivir sin volver a escuchar la voz de mi hermano, pronunciar mi nombre o decirme te amo?’”, recordó.Fue tanto el impacto de esa pregunta que Marisol le pidió a su hermano que le diera una carta, pero no escrita sino en voz donde le contara anécdotas de su vida, recuerdos, lo que significa para ella, entre otras cosas. De esa manera nació Piel Chinita, una empresa que se dedica a la producción de cápsulas de voz como regalo, como legado o como tesoro. Por medio de ellas, las personas expresan amor, gratitud, fortaleza y, al mismo tiempo, esa expresión se convierte en un regalo.“Hace siete años liquidaron a mi esposo donde trabajaba y a raíz de eso decidimos emprender, vimos la oportunidad de iniciar Piel Chinita, nos prestaron una cochera en la casa de un amigo y ahí instalamos el primer estudio”, declaró Marisol Silva Pérez, directora general y fundadora de Piel Chinita.La empresaria describe Piel Chinita como una compañía creadora de comunicación emocional, porque se dedican a crear cartas, discursos o guiones que mueven fibras sensibles en las personas.“Lo que hacemos es ayudarlos a que se comuniquen emocionalmente y generar encuentros entre los seres humanos”, indicó.Inicialmente el problema era que las personas no sabían que decir en las audio cartas, entonces se creó una especie de acompañamiento. Primero le hacen una entrevista al cliente, quien cuenta su historia, y el equipo de escritores crean la carta que se grabará con la voz del cliente. La cápsula de audio se entrega en diferentes dispositivos, por ejemplo, llaveros, peluches, bocinas, entre otros.“Hoy el cliente nunca viene a nuestras instalaciones, contesta la entrevista por escrito y recibe el guion digitalmente y nos manda su audio y la gran magia es que nosotros lo editamos y transformamos como si hubiera grabado en un estudio profesional y eso nos permitió llegar a muchas geografías”, comentó.FRASE“El principal reto ha sido transmitir que no vendemos accesorios, ni productos, ni peluches, porque a veces nos ven en las redes sociales y nos dicen ‘una bocina en dos mil pesos’ y eso no somos. Nosotros ayudamos a verbalizar los sentimientos a escribir por las personas, a editar y crear un legado que va a perdurar”.Marisol Silva, directora de Piel Chinita. MÁS INFORMACIÓN ,