El superpeso no sólo ha ganado terreno al dólar, sino también al resto de monedas, en particular al peso argentino.Cada superpeso mexicano equivale a 10 pesos argentinos por primera vez en la historia, de acuerdo con las negociaciones internacionales que Bloomberg reportó esta semana.El superpeso duplicó su valor en el último año, pues se intercambiaba en cinco pesos argentinos a inicios de febrero del 2022.Cinco años atrás, las monedas de México y Argentina tenían el mismo poder adquisitivo, es decir, cada peso mexicano equivalía a uno argentino.Sin embargo, Argentina sufrió una inflación galopante de 94.8% el año pasado, 12 veces más alta que México y la cuarta mayor del planeta, sólo detrás de Zimbabue, Venezuela y Sudán.Esto se debe a que el banco central de Argentina aceleró la emisión de pesos para financiar el déficit del gobierno de Alberto Fernández, lo que se conoce como "señoreaje"."La inflación es siempre y en todas partes un fenómeno monetario", fue una frase acuñada por el Premio Nobel de Economía de 1976, Milton Friedman.A partir de 2020, el país sudamericano imprimió pesos por cerca de 11 puntos de su Producto Interno Bruto."El problema no es que en la Argentina falten dólares, sino que hay un exceso furioso de pesos", explica Javier Milei, diputado de La Libertad Avanza y economista de la Escuela Austriaca.El año pasado, el peso argentino se desplomó ante el dólar 72% y fue la divisa más perdedora del mundo, lugar que también ocupó en enero de 2023, según Bloomberg.JM