Los términos del tratado bilateral que México y Estados Unidos anunciaron el pasado lunes representarán un fuerte castigo para la industria automotriz, lo que repercutirá en dudas para los inversionistas extranjeros en este sector, así como fugas de las empresas que ya están establecidas en el país, opinó el investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Clemente Hernández Rodríguez.En rueda de prensa en conjunto con Antonio Ruiz Porras, coordinador del Doctorado de Economía del CUCEA, Hernández Rodríguez explicó que más que preguntarse si el nuevo acuerdo es benéfico para el país o no en términos generales, conviene abordar la cuestión desde qué industrias van a resultar favorecidas y cuáles afectadas. La automotriz pertenece al segundo grupo, señaló.Una de las condiciones que plantea el acuerdo anunciado es el salario de 16 dólares por hora, que según el experto, es factible pero solo para ciertos empleados, mientras que el personal menos capacitado se verá en desventaja.El Doctor en Economía profundizó que el alza de los salarios acarreará la necesidad de subsidios, que provocará una carga económica extra para el Estado. También previó la posibilidad de que las empresas apuesten por la automatización para ahorrar gastos y poder cumplir con el requisito salarial, derivando en pérdida de empleos.Sobre la integración de Canadá, la cual sigue pendiente, Hernández Rodríguez opinó que “sí (entren al tratado) o no, les va a ir mal” y advirtió que un resultado no beneficioso para dicho país en la negociación podría incluso provocar la dimisión de Justin Trudeau como primer ministro.NM
