Este año, la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi), Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) y la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI) buscarán apoyo del gobierno y de instituciones financieras para rescatar la inversión en proyectos que se detuvieron en 2020 por la emergencia sanitaria del coronavirus.Con ello, esperan recuperarse de caídas de hasta 70 por ciento anual en obras que fueron detenidas o retrasadas por la pandemia del SARS-CoV-2 durante el 2020, por el cierre temporal de obras, el retraso de entregas, la caída en el consumo y la pérdida de empleos en todo el país.La Canadevi estimó que este año se producirán 149 mil 936 unidades, un alza de 5.3 por ciento anual frente al 2020 y una recuperación frente a la caída de 21 por ciento de 2020.“En 2020 pensamos que cerramos con una disminución de manera general en la vivienda social de un 15 a 21 por ciento, la vivienda residencial y residencial plus está muy afectada con caídas del 50 por ciento y en la vivienda vacacional la baja fue de entre el 70 u 80 por ciento”, afirmó Gonzalo Méndez, presidente nacional de la Canadevi.El año pasado, particularmente los desarrolladores de vivienda tuvieron una caída de hasta 12 por ciento en el volumen de ventas promedio debido a la pandemia.“El problema más grave que hoy tenemos es en la cantidad de inventarios, el menor que se ha visto en los últimos ocho años, lo que podría ser un problema serio hacia el tercer trimestre del año entrante si no se agilizan soluciones”, afirmó Méndez.Por su parte, Eduardo Ramírez Leal, presidente nacional de la CMIC, estimó que este año será alentador para la inversión, después de una caída acumulada para el sector calculada en 18.5 por ciento al cierre de 2020.Agregó que el sector espera una inversión de mil 892 millones de pesos en vivienda e infraestructura en el que buscan la participación de Mipymes, afectadas por la pandemia.“Representan 103 proyectos de todo tipo, que tendrán que ver con inversión mixta, que van desde plantas industriales, centros logísticos, abastecimientos de agua, parques industriales, hospitales privados, que se van a desarrollar en el 2021”, dijo.Enrique Téllez Kuenzler, presidente nacional de la ADI informó que el año pasado sus agremiados invirtieron cerca de 15 millones de dólares, lo que significó una caída, especialmente en la CDMX, mientras que para 2021 la pandemia evitará que la cifra aumente.“Hemos trabajado en buscar medidas para hacer que la inversión regrese y trabajar muy de la mano (con el gobierno) para reabrir en la medida que la situación sanitaria lo permita, las actividades económicas”, afirmó,Agregó que en el 2020 la demanda de vivienda, centros comerciales, oficinas y hoteles sufrió una contracción muy profunda por la incertidumbre económica y las restricciones sanitarias.En el sector industrial, hacia los primeros nueve meses del año pasado, la actividad de los bienes raíces superó en 6 por ciento la demanda neta del mismo periodo de 2019 con 1.6 millones de metros cuadrados, según un análisis hecho por CBRE México.“A pesar de la pausa en las actividades de construcción debido a las medidas por la emergencia sanitaria, los proyectos en construcción han registrado un incremento del 19 por ciento al cierre del tercer trimestre de 2020 con poco más de 2.2 millones de metros cuadrados en proyectos programados para entrega en los próximos 18 meses”, detalló.Los desarrolladores hoteleros han sido de los más afectados por el cierre de fronteras al turismo, la reducción de operaciones de las aerolíneas y la caída del consumo interno.Juan Ramón Abascal Barreiro, delegado de la ADI en Quintana Roo, dijo que la región se mantiene optimista donde actualmente se construyen 28 mil cuartos de hotel.Sin embargo, reconoció que la recuperación podría ser lenta pese a la vacuna contra el COVID, por lo que entre sus peticiones está “que el gobierno se abra más en el tema de los estímulos fiscales o el estímulo a los desarrolladores e inversionistas que se están metiendo con todo”.Situación en la que coinciden representantes del sector de retail, restaurantes, bares y otras actividades comerciales, quienes han buscado el apoyo del gobierno para disminuir los impuestos, otorgar apoyos o beneficios para el pago de rentas a locatarios, pues por la pandemia del coronavirus más de 128 mil espacios de este tipo podrían desaparecer para siempre.El sector de oficinas ha sido de los más afectados con desocupaciones de hasta 200 mil m2, según consultoras como Solili, donde el espacio flexible de los coworkings y oficinas virtuales han ganado terreno gracias al home office o nuevas necesidades de las empresas por la pandemia, tendencias que seguirán en el largo plazo pese a vacuna.