Al 31 de marzo, los precios del gas licuado de petróleo (LP) reportaron un retroceso del 6.2 por ciento; en el caso del autotanque, el precio promedio nacional fue de 9.57 pesos por litro, mientras que por cilindro concluyó en 17.79 pesos por kilogramo; al cierre de enero, el costo del hidrocarburo se ubicó en 10.17 y 18.96 pesos respectivamente. De acuerdo con las cifras publicadas por la Comisión Reguladora de Energía (CRE), en este primer trimestre, la diferencia en el combustible, tan sólo en la Ciudad de México (CDMX), tuvo una caída de 6.3 por ciento por litro y 6 por ciento por kilogramo en tanto, en Nuevo León cayó 4.8 por ciento, y en Campeche más de siete por ciento. En este contexto, el Mont Belvieu, referente internacional, cayó de 0.869 a 0.801 dólares por galón al cierre de enero y marzo del año en curso, lo que equivale a una disminución de 7.8 por ciento. Para Arturo Carranza, asesor en energía del Instituto Nacional de la Administración Pública (INAP) “es razonable que los precios del gas LP tomen una ruta de descenso considerando que son estacionales”. En contraste con el mercado mexicano, éste presenta condiciones diferentes, es decir, “es un mercado donde hay muy pocos distribuidores”, dijo. En su opinión, la tendencia a la baja continuará hasta la próxima temporada invernal. Cabe recordar que en febrero pasado la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) hizo público que investigaba a los distribuidores de gas LP ante posibles prácticas monopólicas absolutas en el mercado de la distribución y comercialización en el país. En contraste y durante el mismo periodo, la gasolina regular mostró un incremento de 5.08 por ciento al arrancar el 2018 en 16.70 pesos su precio promedio nacional, y ubicarse a finales del tercer mes en 17.55 pesos por litro.