Empresarios de Jalisco hablan sobre el papel de la Cámara de Comercio de Guadalajara (Canaco) durante estos 132 años de existencia. Reconocen la importancia del organismo empresarial en el desarrollo del comercio, servicios y turismo.Los empresarios (por orden alfabético) Aurelio López Rocha, Fernando Topete Dávila, Francisco Beckmann González, Julio García Briseño y René Rivial León, hablan también sobre el rol que ha jugado la Cámara para el desarrollo de la ciudad en la vida social y cultural.A los 26 años de edad, Aurelio López Rocha se convirtió en el presidente más joven de la Cámara de Comercio de Guadalajara. El empresario, quien fuera presidente de Calzado Canadá, en 1987 se convirtió en director de esta institución.Una de sus primeras tareas que le encomendaron fue preparar la construcción del nuevo edificio para celebrar los 100 años de fundación de la institución que sería al año siguiente, pues las oficinas ubicadas en Chapultepec y Pedro Moreno ya eran obsoletas. “Había que celebrarlo con bombo y platillo y construir el edificio era algo muy importante y me tocó a mí encabezar el proyecto”, recordó.Para financiar el nuevo edificio, que se ubicaría en Avenida Vallarta y Niño Obrero, se concretó la venta del edificio anterior y se pidieron aportaciones voluntarias a empresarios. Además, se realizaron otras actividades como una edición de litografías, una de monedas conmemorativas del centenario de la Cámara y exposiciones de arte y la primera edición de Expo Venta.Sin embargo, los recursos obtenidos no alcanzaron y fue entonces que se pensó en cobrar una cuota extraordinaria de los socios de la Cámara. “Fue muy complicada la asamblea para iniciar el segundo ciclo, porque justamente estábamos proponiendo la cuota extraordinaria y en la misma asamblea hubo gente que se opuso, pero afortunadamente predominó la razón, la propuesta y el deseo de celebrar el centenario con ese edifico que ya estaba en construcción y había que terminarlo”, recordó López Rocha.Fue así que después de muchos esfuerzos el nuevo edificio de la Cámara de Comercio de Guadalajara se inauguró el 20 de junio de 1988, justo 100 años después de que se fundó la Cámara el 20 de junio de 1888.Para López Rocha la Cámara de Comercio de Guadalajara es su alma mater ya que desde los 22 años ha formado parte de esta centenaria institución. “Tuve la suerte de tener como maestro a Enrique Varela que en paz descanse y con él había un equilibrio. También tuvo como primer vicepresidente a Javier Sánchez Vargas, quien le ayudaba a coordinar las reuniones de Consejo y de Comité Ejecutivo. Era un consejo muy bien estructurado”, concluyó.Para Fernando Topete Dávila, quien fuera presidente de la Cámara de Comercio de Guadalajara del 2015 al 2017, la unión de los organismos empresariales de Jalisco fue fundamental para el cumplimiento de los objetivos y la agenda del sector durante su gestión.“Coincidimos con una camada de líderes empresariales y sociales que nos importaba mucho la representatividad y se logró mucho, esa unidad que todavía persiste y es un soporte a nivel nacional que reconocen a Jalisco con esa unidad empresarial”, destacó.A Fernando Topete, uno de los principales temas que le tocó abordar en su gestión fue el nacimiento del Sistema Estatal Anticorrupción, el cual considera es fundamental para la sociedad. “Va caminando poco a poquito y creo que hemos avanzado”.Otro de los temas que abordó en su gestión fue la ampliación del Aeropuerto Internacional de Guadalajara y el conflicto con los ejidatarios de El Zapote. “Tuvimos muchas reuniones en la Ciudad de México para poder destrabar el problema”. También destaca los cambios que se realizaron al Encuentro Internacional del Mariachi y las Galas del Mariachi: “Se les dio la vuelta a esos eventos y fueron rentables”, aseguróTopete Dávila afirma que la Canaco es un baluarte importante de los tapatíos por su representatividad de los comerciantes ante la sociedad y el Gobierno. “La Cámara es una institución empresarial que está defendiendo los derechos y vigilando porque se hagan lo mejor posibles las cosas con una amplia incidencia en lo empresarial, social y político”.Fernando Topete reconoce que uno de los proyectos que no pudo concretar en su gestión fue la ampliación de las instalaciones del organismo, sin embargo espera que en los próximos años se pueda cristalizar este anhelado proyecto.Desde muy joven, Francisco Beckmann González se incorporó a la Cámara de Comercio de Guadalajara. Primero en la gestión de José Luis Covarrubias Valenzuela y después en la administración de José María Andrés Villalobos, donde fue representante de la Cámara ante el Consejo Regulador del Tequila. También fue representante en el Comité de Adquisiciones del Gobierno del Estado.Pero fue hasta el 2012 cuando tomó la presidencia del organismo empresarial en sustitución de Miguel Alfaro Aranguren. “Todos hemos tenido particularidades, el entorno te va generando. Lo importante de la Cámara es que como presidente tienes la obligación de ver que está para sumar, que está para aportar, para sacar proyectos buenos y para el beneficio de los afiliados y de la sociedad tapatía”, comentó.Francisco Beckmann reconoce que cuando fue presidente le tocó cosechar muchas de las cosas que José María Andrés Villalobos y Miguel Alfaro Aranguren iniciaron. “Nos tocó tener una institución más rentable, con finanzas muy sanas”.Recuerda que una de las acciones importantes durante su gestión fue el rescate del Consejo de Colaboración Municipal conjuntamente con el presidente municipal en turno de Guadalajara, Francisco Ayón. “Fue una gestión difícil de mantener, tanto por la posición física en el Ayuntamiento, como el hacerlos entender que esto estaba para quedarse”.Otro de los temas complicados que le tocaron al frente de la Cámara fue el incendio del Mercado Corona, donde tuvo que negociar con el entonces presidente municipal de Guadalajara, Ramiro Hernández. “Tuvimos un acercamiento uno a uno con nuestra base de afiliados del Centro, Raúl González era el representante y la verdad es que pasamos dos semanas muy complicadas”, recordó.Para el empresario, ligado al sector de la construcción y financiero, la Cámara de Comercio de Guadalajara representa muchísimo: “Es una institución que te quita tiempo, convivencia con la familia, es absorbente, sin embargo te paga mil veces más lo que te puede llegar a quitar. Te da escuela, amistades, alegría, tristezas y más que nada satisfacción, es una manera de dar y retribuir a la sociedad”, concluyó.Julio García Briseño quien fuera presidente de la Canaco en 1991 y 1992, señala que el reto más importante que enfrenta la institución es buscar cómo apoyar al pequeño y mediano comerciante, también se debe de trabajar en buscar que el Gobierno cumpla los derechos elementales a los trabajadores en salud, seguridad y educación. Señala que es de suma importancia lograr que los comerciantes adopten la tecnología.“La Cámara de Comercio debe luchar para poner al alcance de todos los negocios de comercio, servicios y turismo que se logre implementar la tecnología porque eso será fundamental para su crecimiento”, sostiene. Además indica que la institución debe impulsar que los negocios que operan en la economía informal emigren a la formalidad.Entre sus principales acciones durante su gestión destaca el haber participado en la coordinación de la primera Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno en Guadalajara. “Esto fue muy importante, porque es de las pocas ocasiones en que se reúnen todos los países de Iberoamericana y fue aquí en Guadalajara”, recordó. La reunión se realizó el 18 y 19 de julio de 1991 en el Instituto Cultural Cabañas, logró reunir a 21 Jefes de Estado y dos jefes de Gobierno.“Hubo una pasarela desde el Teatro Degollado hasta el Hospicio Cabañas y fue un evento muy importante, la Cámara facilitó las cosas para que los jefes se hospedaran en el Hotel Camino Real y se cerró la calle de Niño Obrero entre Lázaro Cárdenas y Avenida Vallarta”, recordó.En el periodo de García Briseño se estableció el Premio Mercurio al Empresario del año, que ha sido un reconocimiento que destaca el esfuerzo de los afiliados. También destaca que se establecieron módulos para el trámite de pasaportes, licencias de manejo y una ventanilla del Seguro Social, así los socios realizaban la gestión directamente en la Cámara. En 1992 se creó el Fideicomiso para atender a los huérfanos de las explosiones del 22 de Abril.Al hablar de Los resultados obtenidos durante su gestión, el empresario es muy mesurado y dice que todo se los debe a su equipo de trabajo. “La Cámara de Comercio de Guadalajara es el organismo empresarial más sólido de la ciudad y con mayor institucionalidad, tanto a nivel local como nacional. Marca siempre la pauta, busca la unidad y es el mayor logro que podemos destacar de una institución como la Cámara en sus 132 años de fundación”, concluyó. Para René Rivial León, presidir la Cámara de Comercio de Guadalajara fue un gran honor que requirió de mucho trabajo, responsabilidad, intensidad y sobre todo riesgo. El empresario de 88 años de edad y presidente honorario de Pinturas Prisa, encabezó los destinos de la institución en 1993 y 1994.En los primeros meses de gestión, en 1993, a Rivial León le tocó hacer gestiones para atender a las familias de los afectados de las explosiones ocurridas un año antes en la calle de Gante. En 1994 estalló una bomba en el hotel Camino Real de Guadalajara frente a las instalaciones de la Cámara un hecho que se atribuyó a la guerra entre carteles de la droga. Otro episodio que marcó su gestión fue el asesinato del Cardenal, Juan Jesús Posadas Ocampo, ocurrida el 24 de mayo de 1993, en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara.“La Cámara tomó a su cargo el bienestar de la viuda del chofer (del Cardenal), porque nadie se acordó de la mujer que había quedado desamparada y la Cámara tomó a su cargo la educación de sus hijos”, detalló. Estos hechos de violencia provocaron que la ciudad de Guadalajara estuviera en las primeras planas de la prensa nacional e internacional, pero de manera negativa.Fue entonces que Rivial León y el Consejo de la Cámara tomaron la decisión de hacer algo para que el nombre de Guadalajara no fuera negativo y le dieran la vuelta con algo positivo, atractivo, con proyección internacional. Fue así que pensaron en el Encuentro Internacional del Mariachi.En 1994 lanzaron el Encuentro Internacional del Mariachi y la Charrería, que a la fecha ya lleva 26 ediciones y que promueve las tradicionales musicales y culturales de Jalisco en México y el extranjero.JL