La innovación, el diseño y la calidad de sus piezas son la clave del éxito de Maestros Joyeros, empresa joyera tapatía que se ha posicionado en el gusto de los artistas de música mexicana.Artistas como Natanael Cano, Eduin Caz de Grupo Firme, Peso Pluma, Junior H, Luis R. Conríquez, Víctor Cibrián, Santa Fe Klan, Babo de Cártel de Santa y muchos youtubers, son algunos de sus clientes.Maestros Joyeros es una empresa joyera que se distingue por realizar diseños personalizados para cada uno de sus clientes.Dijes personalizados, cadenas, esclavas, anillos, aretes, pulseras, entre otras piezas cuyos precios van desde un millón de pesos hasta los seis millones de pesos son elaboradas de manera artesanal, pero con la más alta tecnología, en su taller ubicado en la Colonia Revolución, en Guadalajara.El proceso inicia cuando los clientes contactan por cualquiera de las vías posibles a la firma, ya sea por teléfono o en su portal electrónico y les dicen qué tipo de modelo quieren; en Maestros Joyeros cuentan con un centro de diseño donde laboran 16 diseñadores que con la idea del cliente comienzan a diseñar en computadora utilizando diferentes programas de software.Una vez que se tienen los primeros renders de la pieza a trabajar, se los hacen llegar al cliente, quien los puede modificar a su gusto y poco a poco va dándole forma a la pieza que necesita, así hasta tener el diseño final. César Arturo Villegas Guzmán, directivo de la empresa, explicó que la honestidad también ha sido clave para colocarse dentro de las preferencias en un mercado tan competido como el joyero.“Estamos abiertos a todo el público. Cualquier persona que quiera realizar algo personalizado con mucho gusto lo diseñamos y lo fabricamos, y sí, últimamente nos hemos enfocado mucho en los artistas de todo tipo, pero no significa que estamos exclusivamente con artistas, estamos para todo tipo de público”, comentó.Las piezas de Maestros Joyeros se venden en México y en otras regiones, tales como Estados Unidos, Puerto Rico y otros países de Centro y Sudamérica.“En México no hay tantos joyeros que te hagan piezas exclusivas con la calidad que nosotros estamos ofreciendo”, afirmó.Maestros Joyeros también incursionó con la venta en línea. “Son piezas de alta gama, de una calidad superior a todo lo que está en el mercado, pero no significa que son de alto precio”, aclaró César Arturo Villegas. Con una tradición familiar de cuatro generaciones en el ramo de la joyería, Maestros Joyeros se ha distinguido por ser una de las empresas más reconocidas en el mercado.La historia comenzó con Don Ambrosio Guzmán Rivas, como parte de la primera generación de la familia en la comercialización de joyería, quien inició vendiendo pequeños artículos de casa en casa; tiempo después invita al negocio a su hija Magdalena Guzmán Bustos.En 1981, uno de los hijos de la señora Magdalena, César Villegas Guzmán, motivado por la tradición joyera de la familia y viendo oportunidad en el mercado, con tan sólo 16 años de edad abre un pequeño taller y se dedica a la fabricación de medallas de oro, liderando este gran proyecto como director del mismo. Las piezas fabricadas obtienen reconocimiento y buenas ventas por la calidad con que se producían, lo que distinguió al taller sobre el resto del mismo giro.En 1987 la señora Magdalena Guzmán, en colaboración con sus dos hijos, Jesús Villegas y César Villegas fundan la empresa Gemas, Perlas, y Joyas SA de CV, con el objetivo de ampliar su mercado.Años más tarde nació Maestros Joyeros como una empresa con tecnología de punta, llevándola a ser una empresa líder en la industria joyera nacional, con capacidad de hacer cualquier línea de fabricación.“Esta unidad de negocios está especializada en trabajos personalizados, únicos, sueños de los clientes, mercancía que generalmente un joyero normal que por falta de tecnología muchas de las veces no lo puede lograr hacer”, comentó César Arturo Villegas.Desde 1996, Maestros Joyeros es una empresa exportadora con participación en exposiciones como JCK Las Vegas, Vancouver y Toronto.Mantiene un contacto estrecho con sus principales mercados en Estados Unidos, Canadá, España, Centroamérica y Sudamérica. CT