El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ampliaría el plazo para cambiar a la versión 3.3 de la factura electrónica hasta el 1 de enero de 2018, según información divulgada por El Financiero este miércoles. El medio citó a Osvaldo Santín Quiroz, director del SAT, quien a través de un programa de televisión en ADN40 dio a conocer que pronto anunciarían medidas para permitir que los contribuyentes se incorporen a la nueva versión. "Estamos considerando en el mes de diciembre flexibilizar las fechas, pero sí de lo que estamos ciertos es que no queremos tener dos fuentes de información diferente para el 2018, entonces para el 1 de enero del 2018, sin duda, vamos a estar ya trabajando con la nueva versión para que la fuente de información sea única”, dijo el titular del SAT en 'El sillón de pensar', conducido por el periodista Pablo Hiriart.Sin embargo, el anuncio no es oficial. Esta mañana el director de El Financiero, Enrique Quintana, detalló en la radio que "seguramente entre hoy y mañana debería aparecer la extensión del plazo para la nueva factura en el Diario Oficial de la Federación". Hasta ahora, el SAT no ha emitido información al respecto y su página oficial sigue mostrándose un contador que recuerda a los contribuyentes que sólo quedan ocho días para cambiarse a la nueva versión de la factura. "Entendemos que cambiar el sistema de facturación de toda la economía es un proceso monumental que significa inversión. capacitación y representa riesgos y es por eso que llevamos un año completo en talleres", refirió Santín según los medios mencionados. La versión 3.3 de la factura electrónica entró en vigor el 1 de julio de este año, aunque la versión 3.2 todavía puede ser emitida por lo menos hasta el 30 de noviembre, pues a partir del 1 de diciembre la nueva versión será obligatoria para todos los contribuyentes. Si el SAT da la oportunidad de prórroga, éstos contarán con un mes más para cambiar sus facturas a la nueva versión. El nuevo esquema incluye reglas de validación para evitar que la factura se emita con errores, es decir que la nueva versión anterior era editable, por lo que era común encontrar montos incongruentes, como facturas con saldos negativos o con el RFC inexistente. Lee también: Simplifican procesos de facturación