La inflación es un tema que no deja de aparecer en las conversaciones de los mexicanos, pero aún más, en sus bolsillos. Pero a pesar de su recurrencia en las pláticas, muy pocos saben con exactitud qué significa y cuáles son sus implicaciones en la economía personal. Por eso, aquí retomamos algunos conceptos claves explicados por el Banco de México (Banxico).La inflación es el aumento sostenido y generalizado de los precios de los bienes y servicios de una economía a lo largo del tiempo. El aumento de un solo bien o servicio no se considera como inflación. Si todos los precios de la economía aumentan tan solo una vez, tampoco eso es inflación.Por ejemplo, explica Banxico: Imagina que vives en un país donde cada semana el precio de todos los productos sube 5 pesos y supón también que quieres ahorrar para comprar un teléfono celular. Para esto tienes que tomar en cuenta que el precio de este aumenta 5 pesos semanalmente, es decir, cada semana que pasa necesitarás más pesos para comprar el mismo celular. En este ejemplo, el precio sube de manera sostenida, es decir, cada semana, y generalizada, ya que están aumentando los precios de todos los productos.Cuando hay inflación en una economía, es muy difícil distribuir los ingresos, planear un viaje, pagar deudas o invertir en algo rentable, porque los precios, que eran una referencia para asignar el dinero de la mejor manera posible, están distorsionados.Durante la década reciente, México ha tenido una inflación baja y estable. La disminución de la inflación ha sido posible gracias a las bases institucionales del Banco de México, entre las que destacan el objetivo prioritario de la estabilidad, la autonomía y la mayor transparencia. El progreso hacia la estabilidad de precios representa una condición favorable para el crecimiento económico y el bienestar social, describe el organismo.Desde 2001, el Banco de México aplica una estrategia basada en objetivos de inflación, y desde diciembre de 2003 se estableció el objetivo de inflación anual de tres por ciento.Cuando se presenta, la cantidad de dinero que se venía administrando tiempo atrás, ya no alcanza para comprar lo mismo que antes y esto afecta a todos: amas de casa, empleados, productores, ahorradores, inversionistas, empresarios, etc. Y sobre todo a los que tienen menos dinero y acceso a los servicios financieros.Existen varias causas que pueden desencadenar este fenómeno inflacionario. Sin embargo, la principal es generada por los excesos de dinero circulando en manos de la población que, al sentirse con más recursos, incrementa sus gastos, generando una mayor demanda de bienes y servicios en la economía cuando la capacidad productiva del país no está en posibilidades de cubrirla, provocando escasez y aumentos en los precios.Para evitar esto, es necesario saber a qué ritmo aumentan los precios y aplicar medidas para frenar este aumento. Para ello se creó el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) que es un número que refleja cómo han variado los precios de un conjunto de bienes y servicios que consumen las familias en México.El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), encargado de medirla, hace una encuesta de ingreso y gasto de las familias a nivel nacional para saber qué es lo que consume la gente en México. Una vez que se tienen identificados los productos, recopilan los precios de esos bienes y servicios en tiendas de todo el país. Esta información se compara quincenal, mensual y anualmente para saber cómo han variado los precios en dichos periodos.Para medir la inflación, cada mes el Inegi da seguimiento a 235 mil precios en 46 ciudades del país. La información se procesa tomando en cuenta qué tanto se gasta en ellos, para así saber cuál de los rubros tiene mayor importancia en el consumo de las familias.Con esa información, el Banco de México implementa las medidas necesarias para controlar la inflación, ya que él es el encargado de regular la cantidad de dinero que circula en el país.Con información de BanxicoOA