Las plazas comerciales juegan un papel, dentro de las ciudades, no sólo económico sino que también se configuran como espacios donde convergen las actividades diarias y de recreación.La Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) alberga decenas de espacios comerciales, desde aquellos que se encuentran dentro de las colonias en las que se ofrecen los servicios básicos, como una carnicería, un café, un centro de lavado, una farmacia y un salón de belleza (entre otros pequeños comercios), hasta aquellos de gran formato que ofertan marcas exclusivas y se convierten en un atractivo de propios y turistas.Las plazas comerciales pueden ser catalogadas en distintos formatos: las mixtas, por ejemplo, incluyen comercio, servicios, oficinas y en algunos casos pueden llegar a tener, incluso, un área industrial, mientras que otras plazas están únicamente enfocadas en servicios y otras más están orientadas a atender necesidades barriales con menos de una decena de locales.Desde el ámbito económico, las plazas comerciales son un motor de inversión, especialmente por aquellos negocios nacionales e internacionales que se establecen en ellas, pero también representan cientos de empleos directos e indirectos.Las plazas, además, suelen revitalizar los entornos en los que se ubican en todos los sentidos, pues su presencia mejora la infraestructura local, lo cual también atrae inversión y plusvalía a las colonias donde se localizan.Para el ex presidente de la Cámara de Comercio, Raúl Uranga Lamadrid, nuestra ciudad se ha convertido en un hub comercial, hablando precisamente desde el tema económico basado en sus plazas comerciales y gracias a su ubicación geográfica, siendo también un atractivo y parada obligada para los visitantes de Guadalajara.De acuerdo con la Sección Especializada de Administradores de Centros Comerciales de la Cámara de Comercio de Guadalajara, la afluencia o aforo promedio que se tiene en las plazas comerciales ronda entre el 70 y el 80%, cifra que llega a superar el 90%, en eventos especiales, como El Buen Fin o la temporada de Navidad. El doctor en Ciudad, Territorio y Sustentabilidad, Alfonso Ascencio Rubio, explicó que las plazas comerciales tuvieron sus inicios y posterior auge hacia la década de los años 60, como un esfuerzo para dar una nueva lectura a la resignificación del espacio público en su interactuar con el comercio, pasando de las plazas públicas de la ciudad a espacios comerciales cerrados que reunían distintos comercios.Contó, que uno de los primeros esfuerzos por explicar esta idea fue el edificio Mulbar, en 1974, bajo el diseño del arquitecto Alejandro Zohn, edificado en el corazón de la zona Centro de Guadalajara, proyecto que mezclaba en un sitio cerrado locales comerciales y oficinas, aunque este no tuvo, desde un inicio, el éxito esperado, como sí lo logró Plaza del Sol, inaugurada en noviembre de 1969, misma que reunió en un sólo espacio la idea de la plaza pública y un centro comercial.“Plaza del Sol intentó reproducir la lógica de la ciudad. Si observamos, Plaza del Sol es una plaza abierta, que lo que hace es tratar de reproducir esta lógica de caminar entre espacios abiertos y cerrados que tiene la ciudad; por ejemplo, en la Plaza de Armas, donde caminas entre espacios abiertos de la plazoleta y cerrados hacia los pórticos, reproduciendo esta idea en Plaza de Sol”, explicó el especialista, también profesor de la Universidad de Guadalajara.El concepto de Plaza del Sol se inspiró en los centros comerciales de Estados Unidos, conocidos como “mall”. Cabe señalar que el proyecto de Zohn fue impulsado por 12 familias de la Cámara de Comercio de Guadalajara, que actuaron con miras de impulsar la economía de la ciudad.Arrancó inicialmente con 140 establecimientos, entre ellos tiendas Maxi, Levy, Fábricas de Francia, Casa Lemus, tienda Franco, Banco Nacional de México, entre muchos otros, hasta ir sumando alrededor de 300 locales donde hoy se albergan marcas como Mundara, Soriana, Bershka, Suburbia, Starbucks, entre otras, tanto nacionales como internacionales. Esta fue la primera plaza comercial, no sólo de México, sino de América Latina.Luego de la apertura de Plaza del Sol y de su éxito comercial, llegó en diciembre de 1974, Plaza Patria, primera en la ciudad con un concepto de espacio cerrado y techado: “De ahí en adelante se fueron modificando las nuevas plazas en cuanto a cómo debían ser y cómo debían integrarse”, señaló Ascencio Rubio.Es por ello que cada plaza es distinta según el concepto que replican, ya sea de espacio abierto, cerrado o espacio de interacción, que reproduce el existir natural de la ciudad, y a partir de lo cual es complementado no sólo con elementos de comercio como lo son, por ejemplo, restaurantes, sino también espacios destinados a la recreación, que se convierten en atracciones de corte turístico. De acuerdo con lo relatado por Olga Clarisa Becerra Mercado, en su investigación “Origen y evolución de los Centros Comerciales en Guadalajara”, tras la apertura de Plaza Patria, este tipo de espacios continuaron en apogeo, abriéndose posteriormente: Plaza Las Torres, Plaza del Ángel, Plaza México, Arboledas, Amistad, Belenes (antes de su renovación cómo Terraza Belenes), e Independencia, está última más enfocada a ser un centro barrial, al contener, entonces, un consultorio, un registro civil, una oficina postal, entre otros servicios. Existen otras plazas comerciales cuyo éxito llegó gracias a que se especializaron en sectores específicos; por ejemplo, Galería del Calzado, un centro comercial que nació oficialmente en 1987 como un espacio especializado en la venta de todo tipo de zapatos, labor que continúa actualmente.Por su parte, la Gran Plaza abrió sus puertas en 1995 bajo el slogan “fashion mall”, como un espacio destinado especialmente a la moda, y que poco a poco fue incorporando nuevos elementos, hasta que en 2005 inició una ampliación que permitió sumar restaurantes de alta cocina.En 2004 se impulsó el proyecto de las Plazas Outlet, en Tlajomulco de Zúñiga, primer y hasta ahora único centro comercial en su tipo en la ciudad, donde las marcas venden saldos de sus piezas. Alfonso Ascencio Rubio contó que las plazas comerciales se han desarrollado y transformado como lo hace también la sociedad, teniendo hoy en día construcciones más modernas.“La ciudad es un concepto social, se construye a través de las necesidades de las personas. Las necesidades han cambiado, los esquemas han cambiado, y de la misma forma se han sumado elementos particulares a las nuevas plazas comerciales, que se convierten en puntos atrayentes que van generando nuevas dinámicas, nuevas sinergias que responden a las nuevas formas de urbanización”, explicó el especialista.De esta forma las plazas comerciales también se han adecuado a las sociedades, teniendo, por ejemplo, espacios “pet friendly”. También, han sumado servicios como gimnasios y hoteles.Entre las plazas comerciales más recientes se encuentra Punto Sur, una plaza de gran formato que abrió al público en 2018, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga. Al año siguiente arrancó operaciones Galerías Santa Anita, en el mismo municipio, para dar servicio al sur de la ciudad con restaurantes, cafés, cines, casinos, gimnasios, tiendas de moda y algunas marcas de lujo.De esta forma se consolidó entonces un corredor comercial que se sumó a espacios como: Urban Center, La Rioja, El Palomar, Plaza Las Villas y Plaza Galicia, plazas de mediano formato que incluyen restaurantes y servicios.Por su parte, plaza La Perla llegó a Zapopan en marzo de 2022 con el objetivo no sólo de ser un espacio comercial, sino también de convertirse en una plataforma de difusión del arte, el deporte y la música, gracias a que cuenta con amplios espacios destinados a la recreación.Por su parte, Plaza Andares, inaugurada en 2008, fue la primera en su tipo en albergar una sección exclusiva dedicada a tiendas de lujo.En 2018 fue inaugurada Landmarck; ubicado en Zapopan, este espacio comercial está destinado a un sector económico medio alto y alto; alberga marcas exclusivas y un conjunto de departamentos de alta plusvalía.Por su parte, Plaza Midtown abrió sus puertas en Guadalajara también en el año 2018; esta plaza tiene su propio hotel y supermercado; así como un pabellón dedicado a marcas de lujo, como: Balenciaga, Bottega Veneta, Dolce & Gabbana y Gucci, entre otras. CT