La Asociación Nacional de Abogados de Empresas (ANADE) consideró riesgosa la centralización que se hará de los registros sindicales y contratos colectivos en el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL) que sustituirá a las juntas de conciliación y arbitraje, ya que representa una “trampa” para que desde el poder ejecutivo se controle a los sindicatos. Adrián Ojeda, presidente del Consejo Directivo Nacional de la ANADE, consideró que actualmente está diluido el registro de sindicatos y contratos colectivos en todo el país, sin embargo, la forma en que la reforma laboral plantea ordenar esos registros puede ser riesgosa. “Lo que hace la reforma es concentrar en un solo organismo, que depende del Ejecutivo, ese registro de sindicatos y contratos, y ahí vemos un riesgo desde el punto de vista jurídico, que dependa de una sola institución el subir o bajar el ‘switch’ sindical del país”, alertó en conferencia. Jorge Sales, coordinador del Comité de Derecho Laboral de la ANADE, explicó que la reforma laboral contempla en el artículo 590A la creación del CFCRL, en el cual se describe como un organismo descentralizado que va a depender del poder ejecutivo, es decir, de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. “Este organismo va a tener mucho poder, porque va a otorgar los registros sindicales de todo el país y es el órgano que va controlar todos los contratos colectivos de trabajo a nivel nacional, a nosotros nos parece que lo que se busca con la creación de este órgano es tener el control absoluto de los sindicatos”, advirtió. La concentración que habrá en el nuevo Centro –apuntó– podría implicar “una regresión al sistema autoritario y van a surgir los nuevos sindicatos corporativos en una versión de la Cuarta Transformación. Creemos que al otorgar a este organismo tanto poder hay una trampa, donde se quiere seguir controlando el tema sindical”. Sales dijo que para evitar ese control, la ANADE propondrá al Senado que el CFCRL pase al Poder Judicial, aunque admitió que está propuesta es complicada en términos de presupuesto y logística por la presión de ratificar el T-MEC, o bien, crear un Consejo Consultivo en este mismo supra organismo donde estén representados patrones y sindicatos. Jaime Bustamante, vicecoordinador del Comité de Derecho Laboral de la ANADE, recordó que actualmente las juntas de conciliación y arbitraje, tanto a nivel federal como local, tienen en su competencia una entidad al interior de su estructura que está encargada del registro de contratos colectivo y de asociaciones sindicales. Mientras que la STPS, a través de la Dirección General del Registro de Asociaciones, es la oficina encargada de otorgar las llamadas tomas de nota a los sindicatos y sus dirigencias. ¿Qué es el CFCRL? El CFCRL será un organismo público descentralizado del gobierno federal, con domicilio en la Ciudad de México, pero contará con oficinas regionales. Entre sus atribuciones, se propone que el Centro tenga facultades para substanciar el procedimiento conciliatorio en los conflictos obrero-patronales, como lo estableció la reforma constitucional de febrero de 2017 y el Capítulo Laboral del T-MEC. En el ámbito de las entidades federativas, esta función quedará a cargo de los Centros de Conciliación locales. El Centro también será el encargado de otorgar a los sindicatos la Constancia de Representatividad, un documento que será condicionante para que determinado sindicato firme un contrato colectivo con el respaldo de los trabajadores. La ANADE envió al senador por Morena, Napoleón Gómez Urrutia, una carta en la que los abogados de empresas expresan su beneplácito por los puntos positivos de la reforma laboral como son las nuevas reglas para evitar la extorsión sindical o los contratos de protección. No obstante, también manifiestan al líder minero su preocupación por aspectos como el CFCRL y el poder que tendrá en cuanto a sus facultades de registro, así como la necesidad de enfatizar y detallar el derecho de los trabajadores a la no sindicalización y aclarar los tiempos de implementación de la reforma.
