Sergio Huacuja, de la Unión Social de Empresarios de México (USEM), organización que representa a la iniciativa privada en el país, consideró que la corrupción en México se ha agravado en el actual sexenio, lo que puede causar perjuicios a la atracción de inversiones al país.“Los índices de corrupción se agravaron de manera alarmante, y no es sólo un tema de percepción, sino de trascendencia de la calificación económica de cada país, lo que nos puede situar como un país en riesgo y por lo tanto, el costo de la inversión extranjera es mayor, por lo que es un tema muy preocupante”, indicó en su conferencia sobre el Sistema Nacional Anticorrupción en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO).Además de los costos económicos que representa para los sectores público y privado del país, a pequeña escala la corrupción se traduce en pérdidas millonarias. De acuerdo a estudios, en México se realizan 200 millones de actos de pequeña corrupción, que cuestan 165 pesos por evento.“La corrupción es una epidemia que frena el desarrollo económico, deslegitima a las instituciones democráticas e incrementa la desigualdad. Combatirla significa la supervivencia del Estado”, mencionó Huacuja.Sin embargo, aceptó que pese a los retrasos en la conformación del Sistema Nacional Anticorrupción y sus organismos estatales, y la falta de voluntad política para sacarla adelante, el castigo legal de la corrupción va caminando “con lentitud, pero sin frenos”.El representante del USEM aseguró que Jalisco es uno de los estados que mejor ha adoptado y conformado su Sistema Estatal Anticorrupción, avalado por organismos como el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), y dijo que su buen funcionamiento dependerá de una sociedad civil más informada y participativa.Ayer, la USEM firmó un convenio con el Comité de Participación Social del Sistema Estatal Anticorrupción de Jalisco, (SEAJ), que permitirá un mayor involucramiento del sector empresarial en el funcionamiento de este organismo. Respecto al convenio, Huacuja señaló que representa un ejemplo de la importancia de la sociedad civil organizada para la lucha contra la corrupción.