Acostumbrado a rescatar lo positivo de cualquier situación, el clavadista Germán Sánchez se muestra optimista en plena cuarentena por el coronavirus, pues el doble medallista olímpico aseguró que el aplazamiento de Tokio 2020 le llegó como caído del cielo. Hace poco más de un año, en abril de 2019, el “Duva” sufrió una fuerte lesión en el tendón de Aquiles, misma que lo dejó fuera de los Juegos Panamericanos de Lima. Sin embargo, hoy se dice agradecido por el tiempo que tendrá para recuperar su mejor versión competitiva. “He tratado de no asustarme, de dejar que esto vaya pasando. El beneficio que tengo es el tiempo que se está dando para los Juegos Olímpicos, ese tiempo para mí es como un regalo del cielo, para podernos preparar mejor y darle más tiempo a la recuperación del tendón, para encontrar mi forma física adecuada y estar a 100 por ciento. Me encuentro bien, sin problemas ya por esa lesión tan fuerte que tuve”.Después de un par de operaciones en este ciclo olímpico, Germán ya enfrentó algunas competencias y ahora espera que todo vuelva a la normalidad para seguir en la búsqueda de un boleto a Juegos Olímpicos, pues según lo afirma, llegar a Tokio es el mayor reto de su carrera.“Tokio sería el mayor reto de mi carrera porque ha sido más difícil, me ha costado más trabajo estar aquí. Puedo decir que para llegar a Río tuve una lesión, pero en el camino a Tokio ya he tenido que luchar con dos lesiones graves, dos cirugías y otros retos personales”.JL