El partido de la segunda División Holandesa Den Bosch-Excelsior Rotterdam fue detenido temporalmente en la primera parte, debido a cánticos racistas contra un futbolista visitante, Ahmad Mendes Moreira, quien respondió en el minuto 44 marcando un gol para su equipo.El delantero holandés, de ascendencia guineana, se dirigió a las butacas desde la que procedían los insultos para celebrarlo, abrió los brazos y se puso las manos en las orejas, entre los pitidos del público.Sus compañeros se lo llevaron a los pocos segundos, pues cayeron algunos objetos desde la grada, y luego Mendes se llevó el dedo índice a la boca, haciendo como que mandaba a callar.Minutos antes, el árbitro, Laurens Gerrets detuvo temporalmente el encuentro y mandó a los futbolistas al túnel de vestuarios, debido a los cánticos racistas, mientras los jugadores del Excelsior Rotterdam consolaban a su compañero, visiblemente afectado.El encuentro se reanudó porque el Excelsior lo pidió expresamente, dijo el propio árbitro a la cadena Fox Sports.El gol de Mendes Moreira supuso el 1-2 para los visitantes y el encuentro terminó con un empate a tres tantos.El conjunto ofreció pidió disculpas después en un comunicado y dijo que emprenderá acciones contra los aficionados implicados en el incidente.Horas antes del partido se produjeron momentos de tensión en Den Bosh, pues hooligans del equipo local buscaron confrontarse contra un grupo de manifestantes que había convocado una protesta contra el racismo.También le pasó a BalotelliEl delantero Mario Balotelli, del Brescia, también fue víctima de racismo el 3 de noviembre pasado por insultos lanzados por aficionados del Hellas Verona.