El juego amistoso entre Argentina y Brasil que ganó la albiceleste 1-0 ha dejado secuelas que avivan la rivalidad entre estos dos países.Thiago Silva, defensa brasileño del PSG, señaló a Lionel Messi del Barcelona como un "consentido de los árbitros, que quiere mandar sobre el juego".Además lo acusó de mal educado por sus enfrentamientos con el técnico amazónico Tité: "Dio dos pelotazos, y el árbitro no hizo nada. Discutió con el árbitro y éste siguió riéndose. Hay que dejar de lado la admiración. Quiere mandar sobre el juego", dijo el zaguero.El árbitro fue el neozelandés Matthew Congei, quién marco un dudoso penalti sobre Messi precisamente. "Siempre busca forzar al árbitro para que le den situaciones de falta o lanzamientos"."Hemos hablado con algunos jugadores que juegan en España y sucede lo mismo, busca controlar el juego e influir en las decisiones del árbitro. Hay árbitros, que por admiración, comienzan a ponerse de su lado. Como no teníamos a Neymar a nuestro lado estábamos en desventaja".Finalmente dijo que el argentino, quien marcó el gol del triunfo fue mal educado cuando mandó a callar a Tité quien pedía que lo amonestaran."Es difícil de entender cuando hablamos de educación sobre el campo, y uno de los jugadores más admirados del mundo hace eso. No se lo haría a una persona mayor, pero que se lo haga a un entrenador... por mucho que exista rivalidad, la educación tiene que ser lo primero".OF