La colombiana Tatiana Calderón, quien se convirtió ayer en la primera mujer latinoamericana en conducir un auto de Fórmula Uno, comparó la experiencia con la de manejar un videojuego en el que apenas hay tiempo para reaccionar.''Subirme a un Fórmula Uno ha sido como jugar Play Station de lo rápido que iba; ha sido un sueño hecho realidad'', dijo la joven de 25 años, minutos después de dar 23 vueltas en un monoplaza de la escudería Sauber en el Autódromo Hermanos Rodríguez de la Cuidad de México.Calderón, oriunda de Bogotá, fue de menos a más en la prueba de Sauber, y aunque se desplazó a velocidades superiores a 350 kilómetros por hora, no cometió errores, según la conclusión de los jerarcas del equipo.Ante un puñado de representantes de los medios, los especialistas de Sauber y su familia, Calderón, quien compite en la Serie GP3, hizo una primera vuelta de reconocimiento, luego tomó confianza hasta que le permitieron recorrer sin restricciones el circuito donde el pasado domingo el británico Lewis Hamilton ganó su quinto título mundial de Fórmula Uno en el Gran Premio de México.“Al subir las pulsaciones se elevaron, luego tomé confianza y ya no me quería bajar. Quiero quedarme aquí”, señaló Calderón, confiada en tener una oportunidad en la máxima categoría del automovilismo para retar a los hombres encabezados por Hamilton y el tetracampeón mundial alemán Sebatian Vettel.''Las mujeres lo podemos hacer bien en este deporte; mi sueño es correr con ellos, pero debo ir paso a paso. Fue una experiencia increíble y estoy muy emocionada'', señaló.Desde que en 1958 la italiana María Teresa de Filippis debutó en la Fórmula Uno y fue víctima de discriminación, sólo cinco mujeres han subido en un auto del principal circuito de carreras.Calderón fue ayer la primera latinoamericana, pero su meta es hacerlo como parte de una escudería en las 21 carreras del circuito en cada temporada.''Siempre he querido competir contra los hombres; no veo necesidad de hacer un campeonato por separado porque nosotras podemos correr con ellos'', agregó.La experiencia de Calderón en México ha marcado un antes y un después en su carrera como piloto, porque ha recibido la oportunidad de manejar un auto de primera, lo hizo con maestría y, según los ingenieros de Sauber, si se entrena de manera regular con una máquina como la que usó ayer mejorará mucho.''Cuando me bajé lo primero que dije fue que parecía un videojuego. La velocidad es increíble y quería seguir''.