Cruz Azul salió vivo en su visita al Atlético de San Luis gracias a Sebastián Jurado. El joven portero cementero detuvo todo lo que le mandó la ofensiva sanluisina que jugó por nota, pero le faltó el golpe final.Sí, Cruz Azul sobrevivió, pero liga cuatro juegos sin ganar. Desde la fecha 1, cuando venció a los Tigres, no ha podido volver a celebrar, y con cinco puntos, comienza a arrastrar el prestigio. El Atlético de San Luis también llegó a cinco unidades, pero con la esperanza de que con este estilo de juego puede dar mucho más.Cruz Azul fue superado durante casi toda la primera parte por un Atlético de San Luis que jugaba como quería, por dónde deseaba y con la forma que más le acomodaba.Si lo mandaba el técnico, el San Luis apretaba la salida, robaba la pelota, y Sebastián Jurado salvaba. Si el técnico lo deseaba, el Atlético esperaba en medio campo, tocaba la pelota con elegancia y velocidad, y Jurado salvaba. Si era necesario, el entrenador ordenaba jugar al contragolpe, explotar la velocidad de sus atacantes, pero el portero de Cruz Azul mantenía su cabaña en cero.La Máquina sobrevivió a una primera parte de pesadilla, en donde apenas tiró a la puerta de Marcelo Barovero.Diego Aguirre mandó cambios en su alineación acostumbrada. Envió a la banca a Erik Lira, a Ángel Romero, quizá por ser partido de media semana, o quizá para buscar más riñón y menos inspiración.Por orgullo Cruz Azul quiso recobrar el control, pero el gusto le duró poco, ya que Santiago Giménez salió, quizá por lesión, y sin referente se entregó a la invulnerabilidad de Jurado.El joven portero justificó su titularidad, voló a todos lados, recibió ayuda de los postes, achicó en forma correcta en los manos a mano.Gracias a él, Cruz Azul sobrevivió al Atlético de San Luis.