Hace una semana, en este mismo espacio hablábamos de aquellos a quienes ya se les acabó el crédito para seguir dirigiendo a un equipo de NFL en apenas su primer año de experiencia y parece que ésta terminó por ser la trinchera de la suerte, pues los mencionados terminaron ganando.Sólo queríamos presumir eso. Ahora, enfocaremos nuestra energía en otra cosa.Se trata de hablar de los premios de media temporada a lo peor de la Liga, elegidos de manera unilateral por quien escribe estas letras.Peor entrenador: Adam Gase, de los Jets, por no tener ni idea de cómo lidiar con sus jugadores al grado de pelearse.Jugador Menos Valioso: Odell Beckham, por llegar con flores y alfombra roja a Cleveland y llevar sólo una anotación en la temporada.Peor ejecutivo del año: Bruce Allen, de los Redskins, por elegir mal a sus jugadores y de paso echarle a perder la carrera a alguien que pintaba para ser uno de lo mejores linieros ofensivos de esta era, Trent Williams.Y así nos podríamos seguir, pero los dioses del espacio en papel periódico nos restringieron y tendríamos que hacerlo en otra ocasión.El mariscal de campo de los Ravens de Baltimore se bajó el lente oscuro: tiene más yardas por tierra que los corredores titulares de 21 equipos y el domingo tuvo su segundo juego perfecto por aire de la temporada tras una actuación de cuatro touchdowns y una paliza a domicilio sobre los Bengals.Si algo nos demostraron los Seahawks, es que una de sus fortalezas es jugar en patio ajeno y más si se trata de enfrentar a un rival divisional, que por más peros que le ponga, logra sacar el resultado, tal y como ocurrió el lunes en Santa Clara donde los 49ers se resistieron hasta el límite, pero terminaron por sucumbir ante la magia de Russell Wilson y la pata bendita de Jason Myers.No lo habíamos dicho, pero no nos quedamos con las ganas, así que ahora sí tendremos la oportunidad de decirles que los Steelers de Pittsburgh, sobre todo la defensiva, está acaparando titulares gracias a sus actuaciones más recientes, pues han ayudado a que el equipo acumule cuatro victorias consecutivas y estén peleando por un puesto en Postemporada. ¿Ahora quién se ríe?En 99.9% de las oportunidades, y sin temor a equivocarnos, podemos afirmar que los Titans de Tennessee son tan grises e irrelevantes que ni nos acordamos que pertenecen a esta Liga. Pero en sus honrosas excepciones, este equipo nos da la de ocho cuando tiene victorias espectaculares como la del domingo pasado ante los Chiefs.Procrear hijos a diestra y siniestra no es directamente proporcional a lanzar pases precisos, y prueba de ello es lo hecho por Felipe Ríos, quien el jueves pasado en Oakland lanzó bolillazos por todos lados. Aunque le anularon dos intercepciones a los Raiders, tres más sí las hicieron efectivas, entre ellas la que selló el resultado final.A estas alturas de 2018 estábamos vueltos locos gracias a las actuaciones de la ofensiva de los Rams de Los Ángeles; un año después, el enamoramiento se transformó en repulsión, pues parece que ya le encontraron el punto flaco a este ataque y a un Jared Goff que de no ser porque su suplente es Blake Bortles, ya estaría calentando banca en cualquier otro lugar.Todos los aficionados al futbol americano en Nueva York tienen escondida la cabeza bajo el pavimento gracias a la actuación de sus equipos, que el domingo nos entregaron una exhibición digna de su nivel en un juego plagado de errores y situaciones de risa loca, en el que “el menos pior” (los Jets) se llevó el triunfo y donde ahora sueñan con hacer el milagro a pesar de tener siete derrotas.Semana a semana, el rival en turno de los Bengals se relame los bigotes porque tiene casi asegurada la victoria, pues este equipo de Cincinnati es más manso que un gatito de angora y en esta temporada no ha servido más que para ser el sparring del que se le ponga enfrente.Yardas por aireYardas por tierraYardas recibiendoTacleadasCapturasIntercepciones