Hace un año, la tristeza y la pena invadieron a los aficionados mexicanos de la NFL, pues debido al mal estado de la cancha del Estadio Azteca, el juego entre los Jefes de Kansas City y los Carneros de Los Ángeles no pudo realizarse en territorio nacional.Sin embargo, a pesar de ese trago amargo, este 2019 la NFL y México se han reencontrado en una cita que se antoja inolvidable en la historia del ya de por sí emblemático Azteca. En esta ocasión los invitados fueron los Chiefs y los Chargers de Los Ángeles, y a pesar de que esta fue la primera vez de los californianos en México, quienes celebraron este juego con peculiar entusiasmo fueron los aficionados de la "tribu".Uno de ellos fue Jair Larrea, aficionado de los Chiefs que en 2018 vio frustrado el sueño de ver a su equipo jugar en la capital del país."Lo que pensamos en aquella ocasión son cosas que no se pueden decir, hubo una gran molestia, aquella vez también viajamos a la Ciudad de México, nosotros somos de Juárez y pues venir nos causó un gasto, pero hoy tuvimos una segunda oportunidad y aquí estamos", compartió.Jair viajó desde la frontera norte del país para observar este encuentro de lunes por la noche, pero el Azteca no sólo recibió a mexicanos y estadounidenses, ya que en el coloso de Santa Úrsula también se dieron cita aficionados de Centroamérica. Tal es el caso de Álvaro López, aficionado de los Chiefs que viajó desde Guatemala con el afán de ver en acción al quarterback que considera podría marcar una nueva era en la NFL: Patrick Mahomes."Nosotros pensábamos viajar al juego del año pasado, pero fue hasta ahora que se pudo venir para acá. Esperamos un gran juego, que por fin retomen la constancia los Jefes y que Mahomes nos brinde uno de sus mejores juegos", finalizó López.Sobre el emparrillado del Estadio Azteca sólo figuraron los Chargers y los Chiefs, pero en las tribunas del coloso no faltaron los aficionados a otros equipos que también lucieron sus colores con orgullo. Se le extrañó mucho, pero la NFL está de vuelta.JM