Hace 44 años, los Pumas levantaron el único trofeo de Copa que han ganado. Al mismo tiempo, un infante español de 12 años, llamado José Miguel González (apodado Míchel), se preparaba para llegar a la cantera del equipo con el que haría historia como futbolista profesional: el Real Madrid.El destino y Jesús Ramírez se encargaron de unir el camino de aquel niño con el de los auriazules y hoy, como uno solo, arrancan su participación en una nueva edición del torneo copero, en el que buscarán sacar provecho de la Regla de Menores, que obliga a los clubes a alinear, al menos, a dos jugadores considerados menores por la Liga.Si algo ha distinguido a la institución universitaria, es la oportunidad que brinda a los jóvenes. Ahora, con el reglamento en vigor, es momento de ver resultados. “Es una buena manera de ver lo que tenemos en la Cantera. Lo tomaremos con seriedad”, señaló Míchel en la víspera del debut ante el Atlético de San Luis.