En siete semanas la NFL espera dar inicio a la temporada número 101 en su historia, con un encuentro en que los Chiefs de Kansas City, campeones del Super Bowl, recibirán a los Texans de Houston.Al menos esa es la intención de la Liga, que tiene previsto realizar campamentos de entrenamiento seminormales, aunque sin partidos de pretemporada, lo que dará oportunidad a que se amplíe el periodo de aclimatación de siete a 18 días y reducir las plantillas de 90 a 80 elementos, y después inaugurar la campaña a tiempo.Los novatos se están presentando en las instalaciones de sus equipos esta semana, la mayoría por primera vez. Los veteranos llegarán la próxima semana y después de las pruebas de COVID-19 y un extenso periodo de adaptación, los entrenamientos iniciarán el próximo mes.Por supuesto, hay dudas sobre si la Liga deportiva más lucrativa podrá mantener segura a su gente en un deporte de contacto durante una pandemia.“Todo lo que estamos haciendo se centra en el concepto de mitigación del riesgo”, dijo el Dr. Allen Sills, jefe de la oficina médica. “Sabemos que no podemos eliminar el riesgo, pero estamos intentando mitigarlo lo más posible para todos”.Sin embargo, se confirmó que hasta ayer 59 jugadores de la Liga han han dado positivo como portadores de la enfermedad.La NFL someterá a sus jugadores a pruebas diarias durante las primeras dos semanas de los campamentos de entrenamientos y desembolsará cerca de 75 millones de dólares.Por otro lado, tanto la Liga como el Sindicato de Jugadores acordaron que se definirán detalles sobre las cláusulas para que los elementos se retiren si presentan altos factores de riesgo y también si se acuerda un pago parcial o total por su participación en caso de abandonar la temporada.JL
