Novak Djokovic es un atleta que sabe anteponerse a las situaciones más complicadas, durante años atrás tuvo que soportar ser abucheado, cuestionado por algunas decisiones polémicas, imposibilitado de competir por un tiempo y estar a la sombra de Roger Federer y Rafael Nadal; pero ahora, con la adquisición de su más reciente título, se ha convertido en uno de los mejores tenistas al ser el hombre más ganador en la historia masculina del Grand Slam con su trofeo número 23. Con 36 años, se coronó dentro de un torneo que cuenta con jugadores a quienes les dobla la edad, pero siempre mostró una capacidad física inquebrantable y una experiencia difícil de vencer. Con este logro, suma 94 títulos en sus palmareses y cada vez está más cerca de poder ser el mejor de todos los tiempos. Su amor por el tenis comenzó desde los cuatro años, en una familia que dominaban los profesionales de esquí, él mostró sus primeros indicios disruptivos y optó por una raqueta. Emprendió su camino de manera más formal a los 12 años cuando decidió emigrar a Alemania donde se inscribió en la Academia de Niki Pilic. Fue a los dieciséis que se llegó su debut en el circuito profesional, mismo al que se aferró hasta poder llegar a sentarse en la mesa con los grandes. Poco después, conquistó su primer título ATP en Amersfoort, donde venció al chileno Nicolás Massu, permitiéndole ingresar al lugar 20 del raking mundial. Desde sus inicios, mostró ser un jugador efusivo, a veces, incapaz de controlar sus emociones. Sin embargo, las cualidades y habilidades del serbio dieron más de que hablar, llevándose toda la atención a su corta edad. En 2007, conoció el sabor de una amarga derrota, puesto que después de ganar el título en Miami, se instaló en la final de Indian Wells, ahí perdió ante su eterno rival, Rafael Nadal.Pudo reivindicarse meses más tarde cuando salió victorioso en el Maters de Estoril donde venció a Richard Gasquet. No obstante, en la semifinal de Roland Garros de Francia, volvió a caer ante Nadal. Fue para los años 2010’s donde salió de las sombras de Federer y Rafael, alzando su primer grande en Estados Unidos. Para el 2011, logró coronarse por primera vez en el torneo de Wimbledon y ganó su tercer título de Grand Slam al imponerse contra el español en la final. Ya en 2015, era el tenista a vencer, habiendo superado tanto al sueco como a Nadal en varios títulos, se consolidó como un deportista exitoso. Durante el Abierto de Australia, llegó a semifinales sin un set perdido y en la final venció a Andy Murray; posterior a eso, en 2016 conquistó por fin el Roland Garros que era el único Grand Slam que le faltaba, y una vez más, Murray fue su víctima. En medio de la crisis sanitaria por Covid-19, el serbio se negó a vacunarse contra el virus, por lo que los organizadores de las diferentes competiciones, le impidieron disputar varios torneos, imposibilitándolo de agrandar su palmarés, pero con la firme decisión de estar en contra de la vacunación. Pero durante ese año, después de pasar por toda la polémica, Djokovic no solo se transformó en el número uno en el ranking de puntos acumulados al vencer a Stefanos Tsitsipas en el Abierto de Francia, sino que también en el tenista de la historia que más dinero adquiere en premios al sumar, en ese momento, alrededor de 123,688.00 euros. Hoy en día, es el único tenista que tiene al menos tres veces ganados todos los Grand Slam, también cuenta con los Masters 1.000. Demostrando que es el tenista más completo tras hacerse de su título 23 en Roland Garros, con el que también es el número uno de la historia y la actualidad. En su carrera, solo le falta ganar el oro olímpico. IO
