Luego de que pusiera en pausa su carrera como piloto, el experimentado Pepe González regresará a la parrilla en este fin de semana, esto cuando la Nascar Peak México viva su penúltima fecha de la temporada en el Trióvalo Internacional de Cajititlán.Como si le hiciera falta algún motivo para sentirse emocionado por su regreso, González destacó que esta carrera es especial para él por volver a competir con su hijo, el piloto Max González, quien conduce el auto número 37.“Mi hijo es la cuarta generación de pilotos de mi familia, hemos vivido y comido automovilismo, llevamos la gasolina en la sangre. El año pasado corrimos varias carreras juntos, aunque no nos fue de lo mejor.“Ahora ya veo a mi hijo muy maduro, un piloto ya hecho y derecho, no tendré que preocuparme por él, sólo por mí y por hacer la mejor carrera posible. Voy por mi carrera, él por la suya, por lo tanto que gane el mejor. Yo creo que él pude quedar en el top cinco”, compartió el piloto del auto 24.Por su parte, Max González señaló que tiene altas expectativas de esta carrera, pues al ser tapatío, se siente inspirado por correr frente a su familia, amigos y al lado de su padre.“Estamos muy contentos de venir a correr a esta ciudad, con mis amigos y familia. Nuestras expectativas son buenas y creo que este fin de semana se pueden dar las cosas para tener un buen resultado”, finalizó.
