Willie Brown estableció el estilo “bump & run” que la defensa de los Raiders utilizó por décadas, fue protagonista de la jugada más icónica en el primer Super Bowl ganado por Oakland y dejó una huella en casi todos los jugadores que se pusieron el jersey negro a lo largo de los últimos 50 años. Brown era un Raider consumado.El esquinero miembro del Salón de la Fama y que fue parte integral del éxito de la franquicia en los emparrillados en la década de los años 70, falleció ayer a la edad de 78 años, tras perder una batalla contra el cáncer.“Willie Brown fue un Raider en toda la extensión de la palabra y uno de los mejores esquineros en haber jugado”, dijo John Madden, entrenador miembro del Salón de la Fama. “Era cómodo para un entrenador tener a Willie Brown en el perímetro; era un buen hombre, un capitán del equipo y un Raider de verdad desde el momento en el que se nos unió en 1967 hasta el día de su muerte. Muchos en la organización de los Raiders y yo lo extrañaremos”.Después de llegar en 1967 vía intercambio con Denver, Brown jugó 12 temporadas con los Raiders, ganando el Super Bowl XI y retirándose tras la campaña de 1978. Fue exaltado al Salón de la Fama en 1984.Entrenador asistente con los Raiders entre 1979 y 1988, ganando otro par de Super Bowls, también fue entrenador en jefe universitario y de preparatoria entre 1991 y 1994. Regresó a los Raiders en 1995 cuando la franquicia volvió a Oakland, ocupando el puesto de director de desarrollo de personal.