La fiesta del Mundial de 1970 en realidad comenzó el 8 de octubre de 1964 en Tokio. EL INFORMADOR dio fe de ello en su portada de deportes: “Para México, el Mundial de Futbol de 1970”.Votaron 56 naciones a favor de nuestro país en el Congreso de la FIFA, mientras que 32 prefirieron a Argentina, que perdió por cuarta vez en una contienda para organizar la Copa del Mundo. “Me sorprende esta decisión luego de 100 años de futbol en mi país, pero la aceptamos”, dijo Miguel Pisano, el representante del comité organizador albiceleste.La confianza de la FIFA en México tuvo mucho que ver con el tema de que la capital sería la sede de los próximos Juegos Olímpicos, por lo que había los recursos y la infraestructura para organizar la novena edición de la máxima fiesta del balompié.Y sí, eso fue México 1970, una fiesta del futbol. Tras el sabor amargo del Mundial de Inglaterra, tanto por los nefastos arbitrajes como por la violencia en la cancha que había dejado fuera a los mejores jugadores del torneo, la competencia en tierra azteca se erigía como la gran oportunidad de reivindicación del deporte más popular del planeta para entonces.A México llegaron las Selecciones top en su mejor momento: Brasil con Pelé sano y a 100%, Alemania ya con Beckenbauer como su gran líder, Uruguay con su mejor generación de futbolistas desde 1950, Inglaterra con sus campeones en plena madurez, Italia con un equipo discreto pero a tope futbolístico y la mejor generación peruana de la historia con Teófilo Cubillas, un crack al nivel de los brasileños.Pero la fiesta no podía ser completa sin un gran anfitrión y eso fue México para la Copa del Mundo. Sus cinco sedes, Ciudad de México, Guadalajara, Puebla, León y Toluca, se prodigaron en atenciones y en calor humano para los equipos participantes.En esta ciudad la algarabía se instaló desde antes del arranque del torneo y no se fue sino hasta que terminó la Copa del Mundo.Desde la inauguración de la Plaza Brasil un día antes del arranque del torneo, hasta los cierres espontáneos en el centro de la ciudad, pasando incluso por episodios innecesarios como la entrega de la medalla al Mérito Deportivo de parte del Gobierno a Bobby Charlton y a Pelé. Guadalajara se desvivió por hacer sentir a los visitantes, pero sobre todo por hacer sentir como en Río de Janeiro o Sao Paulo a la Selección de Brasil, campeón con honores de esa Copa del Mundo.Fue el inicio de un largo romance que perdura hasta nuestros días.El grupo que se diseñó para México en el Mundial de 1970 dio resultados, pues el Tri calificó por vez primera en su historia a la segunda ronda de una Copa del Mundo.México goleó a El Salvador, venció 1-0 a Bélgica y empató con la URSS, para avanzar en segundo lugar del Grupo A, lo cual lo sacó del Estadio Azteca para Cuartos de Final.En esa instancia, el Tri no fue rival para Italia, que lo venció 4-1 en Toluca.Con la eliminación de México la fiesta no se apagó, pues el país se puso del lado de Brasil y tuvo su revancha en la Final, cuando los cariocas golearon 4-1 a Italia.
