Representa a su país, al Estado que le ha dado tanto, pero sobre todo a su familia, el motor que le ayuda a salir adelante día con día. Maximiliano López, de sólo 17 años de edad, nacido en Mérida, radicado primero en Toluca y luego en la Perla Tapatía, ya puede presumir de logros a nivel internacional en la disciplina del boliche. Pertenece a la Selección mexicana juvenil de la especialidad y recientemente regresó de París, Francia, en donde obtuvo medallas de plata y bronce.Pero estos logros en la Ciudad Luz vinieron acompañados de un apoyo incondicional por parte de la familia, de sus allegados, no así de las autoridades, ya que la Conade se deslindó de cualquier ayuda económica posible, y lo único que le proporcionó a este grupo de jóvenes que asistieron a Europa fue un coach, el cual no necesitaban, ya que iban totalmente entrenados y preparados para trascender.“Esa fue una parte muy triste, desde que nos dijeron que éramos la Selección, dos hombres (Maximiliano y Manuel Ordaz, de Nuevo León) y dos mujeres (Iliana Salinas, de Nuevo León, y Keyla Covarrubias, del Estado de México), pensamos que se nos iba a apoyar con algo, fuimos a la competencia Centroamericana en noviembre y ahí se nos dijo que no se nos iba a apoyar con absolutamente nada; nosotros hicimos ese esfuerzo para que México estuviera representado, y tanto la Federación de Boliche y la Conade no nos decían nada, era enero y no nos decían nada, ni de inscripciones, vuelos, hoteles, nada; entre jugadores y los papás de los jugadores nos pusimos de acuerdo para ver las inscripciones y estar ahí, todo por nuestra cuenta, hasta que la Federación nos hizo caso, pero eso fue apoyándonos con un coach al que le teníamos que pagar todo”, dijo lamentándose Maxi López.“El esfuerzo se hizo, dio frutos muy positivos y desafortunadamente no hubo ese apoyo, ni de playeras, nos tuvimos que llevar las que habíamos utilizado cuatro meses antes, pero fuera de eso, las medallas, el esfuerzo y todo, nadie nos lo quita. Fue una bofetada con guante blanco, porque el sueño era representar a México”.- ¿Cómo fue esa experiencia en París?- Con el hecho de competir contra los mejores del mundo es un gran nervio, aparte de que fue un sueño hecho realidad el ser mundialista representando a México, ha sido un sueño que busqué en estos ocho años que he practicado el boliche. Hubo jugadores muy preparados, había miles de estilos diferentes para jugar y fue una competencia por las medallas con mucha hambre de todos los jugadores.- ¿Qué sensación deja tener logros para México?- Desde ver tu nombre en los primeros tres a nivel mundial es una satisfacción y un orgullo muy grande. Todo el trabajo realizado da frutos y se ven reflejados en el podio, viendo la Bandera de México presente, pero creo que me falta preparación para escuchar el Himno por haber obtenido el oro.- ¿Qué sigue para ti este año?- Sigue una competencia nacional en el mes de junio en Monterrey. Son ocho días en donde los mejores de cada Estado van, compiten y los mejores 12 vuelven a portar la playera de México para los siguientes torneos, como el Panamericano de Boliche Sub-21 en Costa Rica, luego el Mundial Sub-21 en Las Vegas.- ¿Por qué te dio por jugar boliche?- Hace ocho años que llegamos a Guadalajara vimos que había muchos boliches por toda la ciudad, mi papá ya jugaba desde que era joven y veníamos cada fin de semana y todo era boliche. A mí me frustraba mucho que la bola se fuera por el canal, yo quería ver siempre chuzas, de ahí mi papá me motivó a jugar, a entrenar, tomé clases y me gustó, seguí, me regalaron mi primera bola de boliche y fue felicidad, y supe que el deporte era para mí.- ¿Qué otro deporte te gusta?- Me gusta la natación, la practico en la escuela, una hora diaria de lunes a jueves. Me gusta mucho ese deporte, pero para la escuela, no para practicarlo a nivel profesional; pero también el futbol, le voy al Toluca.En Francia fue su segunda competencia internacional, la primera fue en Colombia en el mes de noviembre del año pasado haciendo pareja con Sebastián Núñez, logrando medalla de plata, su primer logro a nivel mundial.